27-M.- Touriño ofrece "trabajar codo con codo" para apartar del poder a políticos del "baúl de los peores recuerdos"

Actualizado: viernes, 25 mayo 2007 0:20

Asegura que su Gobierno "va a seguir desmontando peajes" y reprocha al PP que no entienda "la solidaridad y el reequilibrio territorial"

OURENSE, 24 May. (EUROPA PRESS) -

El secretario general del PSdeG, Emilio Pérez Touriño, se ofreció hoy en Ourense a "trabajar codo con codo" con los electores para apartar del poder a políticos que traen a la memoria "el baúl de los peores recuerdos", entre los que aludió al alcalde de la capital, Enrique Nóvoa; y al presidente de la Diputación, José Luis Baltar; con el objetivo de "subir a Ourense al tren del progreso".

En su intervención en el mitin más multitudinario del PSdeG en la campaña electoral, con más de 2.000 asistentes, Touriño aprovechó de nuevo la fotografía simbólica para denunciar el retraso del AVE en la que Baltar y Nóvoa se retrataron en una estación ferroviaria con el líder del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, para hilvanar un discurso en el que contrapuso "el tren de la modernidad" que propone su partido con el que oferta "billetes de primera o de segunda" promovido por los populares.

En la única de las siete ciudades en las que todas las encuestas dejan abiertas posibilidades de gobernar para los tres grandes partidos, Touriño demandó el apoyo para su proyecto municipalista para derrotar en las urnas a quienes aguardan "con los brazos cruzados", en una "espera inútil, porque el tren del PP ya pasó y lo perdieron: en Madrid hace tres años, en Galicia el 19 de junio y el día 27 lo perderán en Ourense".

Así, en el penúltimo día de campaña, donde volvió al enclave en el que el pasado 11 de mayo abrió la carrera electoral, el dirigente socialista declaró que Ourense "no merece seguir con políticos de tan cortas miras" y reivindicó las políticas adoptadas por la Xunta para contribuir al reequilibrio territorial, como la gratuidad del peaje de la autopista de conexión con Santiago en el tramo entre Dozón y Ourense. "Se sienten culpables porque tienen mala conciencia", declaró, si bien avanzó que la Xunta "va a seguir desmontando peajes".

CRÍTICAS AL PP

Según él, "la única verdad" del PP en la campaña del 27-M es la que sostiene que ahora la liberación de este canon tendrán que pagarlo todos los gallegos, si bien lamentó que esta crítica responda a que "no entienden el lenguaje de la solidaridad y del reequilibrio territorial". "Que lo diga Cascos", declaró en alusión a la presencia ayer en Galicia del ex ministro de Fomento en la época del 'Prestige', de quien ironizó con que "se nota que no había temporada de caza: no estuvo cuando tenía que estar y ahora aparece por aquí".

De igual modo, rechazó "hablar de ese senador que está ahí por Galicia y que tiene un sueldo por Galicia, pero que ahora vive y vota en Madrid", en referencia al escaño por designación autonómica que el ex presidente Manuel Fraga tiene en la Cámara Alta y a quien a lo largo de la campaña incluyó entre la "galería de figuras ilustres de la historia que trae a sacar a paseo el PP".

En contraposición, Touriño reivindicó la apuesta de su partido, que "no admite discriminación alguna por sexo, raza, origen o nacimiento", y promulga la "igualdad entre ciudadanos, sean quienes sean", y proclamó que en áreas como Ourense "se acabó la resignación y el estar de brazos cruzados". "El tren del futuro debe tener el mismo ancho de vía para todos los territorios para que nunca más haya una Galicia de dos velocidades: unos atrás en el furgón de cola y otros delante", proclamó en una de las dos ciudades del interior, castigada durante años, a su juicio, por la "marginación" del PP.

REVERTIR LA HISTORIA

Por ello, propuso "revertir la historia" y, siguiendo con el símil ferroviario, convocó a los ciudadanos "a trabajar codo con codo para retirar de las vías de alta velocidad todos los peajes y la discriminación". "Ourense no puede quedar fuera de esa gran marea del cambio, pero el único billete es vuestro voto, el voto socialista", advirtió y abogó por un "cambio de agujas" en la ciudad de As Burgas para que "todos los trenes, el de Zapatero, el de Touriño y el de Paco --Rodríguez--, vayan en la misma dirección", aseveró.

Además, aprovechó su presencia en la tercera ciudad de Galicia para reprochar las últimas polémicas del alcalde, Enrique Nóvoa, que ostenta el bastón de mando desde febrero, tras los 12 años en el poder de Manuel Cabezas. En relación a que tenga a 16 personas censadas en su residencia particular dijo: "cuando vi su casa me pareció más una casa de acogida que de familia, un cachondeo". "Los derechas siempre tienen todo muy grande", bromeó, lo que provocó la hilaridad de las más de 2.000 personas que se concentraron en el pabellón de Os Remedios.

PUERTAS ABIERTAS AL CAMBIO

Por su parte, el candidato, Francisco Rodríguez, que fue recibido con la consiga 'Paco alcalde' por los asistentes, ironizó con la intensa lluvia que cayó hoy sobre la ciudad de As Burgas y declaró: "dicen que es cosa del PP, para evitar que viniera gente a este acto", en el que estuvo respaldado por el presidente de la Xunta, a quien valoró su "compromiso con la provincia" de Ourense en su conjunto.

En su intervención, Rodríguez vio las "puertas abiertas para un nuevo tiempo político" y aseguró que "soplan vientos de cambio" que, según él, tornarán en un "huracán imparable" que llevará a "abrir" el consistorio para "todos los que estuvieron cerradas" en las tres legislaturas en las que el popular Manuel Cabezas ostentó la mayoría absoluta.

Así, declaró que no hay ciudadanos "de primera o de segunda" y abogó por "pensar más en los vecinos y menos en los ladrillos o en los negocios del alcalde y de sus familias". Al respecto, consideró que tanto el actual regidor y candidato a la reelección, Enrique Nóvoa, como su antecesor, que lo ejerció durante 12 años, "son igual de pillos, igual de tramposos".

En este sentido, aludió al urbanismo como el ámbito central de su gestión en los cuatro años que ha pasado en la oposición, en los que denunció el modelo promovido desde la Alcaldía, "pensado en el interés de unos poquitos que sacaron tajada", y propuso diversificar los sectores de atracción para convertir a Ourense en una "referencia" en Galicia, como el termalismo o el medio ambiente.