VIGO, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los bomberos creen que una fuga en un bote de butano, de los que se usan para recargar mecheros, pudo crear una bolsa de gas en una alacena del piso de la plaza Pintora Maruja Mallo, donde este viernes se registró una deflagración que se saldó con dos heridos (un hombre y su hijo de corta edad) y cuantiosos daños materiales.
El suboficial de los bomberos de Vigo, Jesús Rodríguez, ha explicado que el hombre, R.F.D., de 31 años de edad, se encontraba en la cocina cargando mecheros y usando varios de esos botes de gas butano licuado. Según las primeras impresiones de los servicios de emergencia, al guardar las botellas en una alacena, una de ellas "debía tener una fuga", por lo que se creó una bolsa de gas que, en un espacio pequeño, alcanzó una gran presión.
Al volver a abrir ese armario, y al mezclarse el gas con el oxígeno, se produjo una gran deflagración que "actuó como una bomba y deshizo el piso", ha apuntado Jesús Rodríguez, quien ha confirmado la importancia de los daños: ventanas arrancadas de cuajo, un tabique de la cocina caído, y numerosos desperfectos en toda la vivienda, el apartamento 4ºE del número 7 de esa plaza.
Sobre la posibilidad de que un bote de gas de ese tamaño (suelen ser de 300 ml o menos) pueda ocasionar tantos destrozos, el suboficial de bomberos ha explicado que el daño de la onda expansiva depende de la cantidad acumulada de gas y de la presión que alcance. "Puede pasar también con botes de insecticida, aunque parezca increíble", ha añadido.
Finalmente, ha confirmado que, aunque la deflagración fue grande, no se llegó a generar un incendio. También ha subrayado que se han registrado daños en algunas puertas y ventanas de otras viviendas, pero que la estructura del edificio "está intacta".
DOS HERIDOS
La deflagración se produjo sobre las 13.00 horas, y como consecuencia de la misma, resultó herido con varias quemaduras un hombre de 31 años de edad, R.F.D., y un bebé, que tenía contusiones al caerle objetos encima.
Hasta el lugar se desplazaron una ambulancia medicalizada del 061 y una ambulancia asistencial, que trasladaron al hombre a la Unidad de Quemados del Hospital Povisa, y al bebé, al Hospital Álvaro Cunqueiro, junto con su madre (que también estaba en la vivienda, pero que resultó ilesa).
Tanto bomberos como Policía Científica han tomado muestras y han inspeccionado la vivienda para determinar con claridad las causas del siniestro. Asimismo, la propietaria del piso se presentó en el lugar y fue informada de lo sucedido.