La discusión del día de los hechos pudo deberse a que la mujer iba a abandonar la vivienda pero habría decidido quedarse
VIGO, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El hijo de la mujer de 71 años de edad María José R., que falleció el pasado 29 de octubre tras ser arrojada al vacío supuestamente por su marido desde la ventana de un tercer piso en Vigo, ha declarado que sabía que su madre sufría maltrato psicológico por parte del presunto agresor, si bien ha asegurado que nunca presenció maltrato físico y su madre tampoco le dijo nada.
Así lo han comunicado fuentes conocedoras de la causa, después de que el hijo de la mujer, que ejerce la acusación particular, haya declarado este miércoles como testigo ante la titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo. Tras él, han comparecido dos agentes de policía que fueron los primeros en llegar al patio del edificio del barrio vigués de O Calvario en el que hallaron a la mujer.
El hijo de la víctima, natural de Portugal pero con domicilio en Salceda, ha respondido a las preguntas de todas las partes: jueza, fiscal y abogadas de la defensa, de la acusación particular y de la acusación popular --que ejerce la Xunta--; y ha indicado que hablaba con su madre todos los días y se veían en días alternos.
Según las mismas fuentes, el hijo ha aseverado a la juez que su madre le ocultó que en alguna ocasión le tuvieron que dar de comer sus vecinos y ha defendido que "no imaginaba que hubiera maltrato físico" por parte del marido, con el que él también llegó a convivir durante una época y con el que mantuvo una relación "ni buena ni mala".
No obstante, ha comunicado que su madre sí le transmitió que sufría maltrato psicológico por parte de su pareja, porque el hombre la insultaba y amenazaba. Asimismo, ha ratificado que la mujer tenía una "gran dependencia" emocional y económica del marido, del que quería divorciarse y llegó a presentar algunos papeles.
Además, ha manifestado que en los días previos al suceso en el que falleció María José, ella estaba empaquetando sus cosas para irse de la vivienda que compartía con el presunto agresor. Así, aunque inicialmente acordaron que se iba ella del domicilio, la mujer fue asesorada para que se quedase en la casa y supuestamente cambió de opinión, lo que fuentes del caso han apuntado como un posible motivo de la discusión del día de los hechos.
LA RELACIÓN
Tal y como han trasladado, el presunto agresor, que se ausentaba en repetidas ocasiones sin dar explicaciones, llevaba toda la semana "desaparecido" y dijo a María José que se iba con su hermano en Valladolid, aunque supuestamente fue visto por Vigo.
Las mismas fuentes han resaltado que ella fue a Cáritas a pedir ayuda y en ocasiones como él no la dejaba entrar en su domicilio llegó a dormir en casa de vecinos, en un parque y dos noches en un trastero. Pese a todo, ella sentía pena por el hombre y se mostraba preocupada por él, que tiene un problema hepático.
La abogada que defiende al presunto agresor ha recurrido el auto de prisión y pide la libertad de su patrocinado. Además, al igual que otros letrados previamente, ha solicitado renunciar al caso, pero el Colegio de Abogados inicialmente ha rechazado su petición.
Por su parte, la abogada de la acusación ha adelantado que va a solicitar la averiguación patrimonial del supuesto agresor para que bloqueen sus posesiones de cara a afrontar una posible responsabilidad civil.
DETENIDO
El pasado 18 de noviembre el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo decretó el ingreso en prisión comunicada y sin fianza para la pareja de la mujer, Alberto José V.G., de 62 años de edad, al se le imputa en relación con estos hechos un supuesto delito de asesinato.
Tal y como han manifestado las mismas fuentes, el hombre, que tras su detención permaneció por un brote psicótico 20 días en la Unidad Psiquiátrica del Hospital Álvaro Cunqueiro (HAC) hasta recibir el alta, se encuentra actualmente en prisión.
El presunto agresor aseguró a la Policía que no había matado a su mujer, sino que ella misma se había tirado por la ventana. "Esto viene de atrás. Esta hija de puta me estaba envenenando", llegó a afirmar.
Según informes de la causa, María José padecía episodios habituales de malos tratos físicos y psicológicos por parte de su pareja, y en la autopsia presentaba signos de forcejeo y síntomas de haber sido sometida a una "acción de sofocación o agarre del cuello". Además, fuentes judiciales señalaron que antes de fallecer en la ambulancia, la mujer confirmó a un policía: "Me tiró mi marido".
