Un hombre acusado de quedarse con la mitad de un premio de la Primitiva atribuye a un "montaje" la denuncia

Actualizado: lunes, 28 mayo 2012 15:47

El denunciante afirma que pagó todo el boleto, pero se contradice sobre quién cubrió los números


A CORUÑA, 28 May. (EUROPA PRESS) -

Un hombre, vecino de Noia (A Coruña), acusado de quedarse con la mitad de un décimo del Gordo de la Primitiva, premiado con 10 millones de euros, ha atribuido a un "montaje" la denuncia presentada por el supuesto amigo con el que habría jugado el décimo.

En el juicio, que ha comenzado en la Audiencia Provincial de A Coruña, el denunciante, por su parte, afirmó que pagó todo el boleto, aunque se contradijo en cuestiones como quién cubrió los números o si jugaba siempre los mismos.

La Fiscalía pide para Ricardo P. una pena de cinco años de cárcel por un presunto delito de apropiación indebida con la agravante de abuso de confianza, petición que la acusación particular eleva a seis años. Mientras, la defensa pide la absolución para su cliente por unos hechos que se remontan a noviembre de 2005.

Según el Ministerio público, procesado y víctima acordaron repartirse el premio si el boleto resultaba premiado. Afirma, además, que el denunciante, José F., le reclamó en varias ocasiones parte del premio, cuyo resguardo se habría quedado el acusado.

En el juicio, el procesado afirmó que sólo conocía "algo" al denunciante y argumentó que desde mediados del año 2000 no entraba en el bar en el que, supuestamente, habrían rellenado el boleto y cuyo propietario lo llevó a sellar. Por el contrario, sostuvo que las relaciones con el dueño de este establecimiento, próximo a su negocio, no eran buenas.

"Me querían precintar el almacén", alegó el procesado, quien explicó que fue él, a principios de septiembre de 2006, quien le dijo al denunciante que le había tocado la primitiva. "Le había dado una trombosis y le pregunté que tal estaba y entonces se lo comenté", ha argumentado.

REPARTO DEL PREMIO

Asimismo, ha indicado que "a los quince días" José F.se presentó en su domicilio, junto a otros dos vecinos del municipio, exigiéndole la mitad del premio. "Le dije que no viniera con estas trapalladas", precisó el acusado, quien aseguró que el boleto no lo cubrió ese día porque hacía "los mismos números y no cambiaba el impreso hasta que no entraba por la máquina", ha apostillado.

Frente al argumento del denunciante, negó haberle reconocido en alguna ocasión que le correspondía la mitad del premio y atribuyó la denuncia a la "envidia" y "rencor". Por el contrario, José F. admitió que el procesado no iba a ese bar, pero dijo que ese día lo hizo porque él se lo pidió.

Admitió jugar habitualmente con otro amigo, empleado de la empresa de su hijo y suyo con anterioridad, pero no con el acusado con el que aseguró haberlo hecho "solo esa vez". A preguntas de la defensa, señaló que los números los apuntó el procesado, pero los dijo él. "Diría mal", replicó a este letrado cuando le preguntó porque ante el juez había dicho que los números los cubrieran entre los dos.

El denunciante admitió también, a preguntas de uno de los magistrados que enjuicia el caso, que no comprobó en el periódico si le había tocado la Primitiva cuando "a los dos o tres días", según reconoció, se enteró de que el premio había recaído en Noia.