El Ayuntamiento de Lugo renuncia a recurrir y confirma que pedirá el informe una vez la sentencia sea firme
LUGO, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Lugo ha anulado la licencia de la edificación de las torres de O Garañón, en Lugo, como respuesta a un recurso interpuesto por la Xunta de Galicia en 2008.
De ello ha informado la delegada municipal de Urbanismo, María Novo, en una rueda de prensa en la que también ha aclarado que la sentencia "da la razón" al ayuntamiento en cuanto a la "corrección" del Plan Especial, que también fue impugnado por el Gobierno gallego. "Confirma que está ajustado a derecho", ha destacado.
En cuanto a la licencia de las torres, que, según ha señalado, fue otorgada "con todos los informes favorables", ha señalado que la Justicia "entiende que está mal otorgada porque carece de informe de Cultura". Este documento no fue solicitado porque "implicaría aplicar al suelo urbano normativa subsidiaria de suelo rústico", ha justificado Novo, quien ha expuesto que el juzgado de lo Contencioso, al igual que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, hacen ahora "una nueva interpretación de esta normativa" y consideran "necesario" ese informe.
En todo caso, y dado que el ayuntamiento tampoco le "gusta" la edificación, ha decidido "no recurrir". "Sentado ya un nuevo criterio jurisprudencial, vamos a esperar a que sea firme", ha afirmado, tras apuntar que la Xunta "puede recurrir" en lo tocante al Plan Especial y también el propio constructor. "Una vez que sea firme, pediremos el informe a Cultura para que nos diga cuáles han de ser las condiciones de la licencia", ha concluido.
"Cualquier otra administración, a las puertas de un período electoral, hubiese huido hacia delante y hubiese dicho que nos basábamos en la ley", ha opinado, para contraponer este modo de actuar con el del Ayuntamiento de Lugo, que "entiende que si es necesario el informe de Cultura, hay que pedirlo y no continuar con esta cuestión".
OBRA "PARADA"
Ahora, tal y como ha indicado la delegada de Urbanismo del ayuntamiento lucense, la obra está "parada" por el juzgado, que es "el único" que puede paralizarla una vez concedida la licencia.
"Hubo un intento por parte del ayuntamiento de llegar a un acuerdo entre todas las partes, que hubiese permitido modificar lo que se estaba haciendo", ha recordado, en alusión a que no llegó a buen puerto, y ahora debió ser "paralizada" la obra por decisión judicial.
