La oposición se suma a una propuesta del BNG para frenar el drama de los desahucios, pues toca "proteger a la parte más débil de la sociedad"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Vivienda del Grupo Popular, Jaime Castiñeira, ha admitido este jueves que "no es lógico" que se ofrezcan realojos a familias que van a ser expulsadas de su vivienda "a 30 o 40 kilómetros" de su residencia habitual; pero ha reivindicado que tanto la Xunta como el Gobierno central están tomando "medidas" ante el drama de los desahucios.
Así, en comisión parlamentaria, en el debate sobre una iniciativa del BNG que contó con el apoyo de PSdeG y AGE --y el voto en contra del PP-- para requerir al Estado la paralización de todas las ejecuciones hipotecarias en curso, el popular lucense ha dicho que confía en que los distintos programas y actuaciones existentes puedan "ir dando solución" a este problema.
En la defensa de su proposición no de ley, el diputado nacionalista Cosme Pombo ha sacado a colación el reciente desahucio de una familia con un bebé de un año en Ourense para lamentar que la Xunta "consienta" que esto ocurra. "Tenemos derecho a una vivienda digna", ha demandado, antes de pedir al Gobierno gallego que utilice sus competencias en materia de vivienda para "garantizar un derecho fundamental".
Máxime, ha proseguido, cuando, en muchos casos, son entidades bancarias que han recibido miles de millones de euros públicos para su saneamiento las que ejecutan los desahucios. Por ello, ha propuesto que se exija a la banca "soluciones negociadas" con las familias en dificultades, la devolución de las cláusulas suelo "abusivas" y "una quita" en las hipotecas por su "sobrevaloración" de las viviendas.
Por su parte, Antón Sánchez, de AGE, ha introducido una enmienda para solicitar a la Xunta la creación de un parque público de viviendas para su "alquiler social" y que se garantice que "en todas las ciudades y villas existan suficientes viviendas" para realojar a los desahuciados. "Hay que rectificar", ha argumentado, crítico con que la Xunta ofreciese a la familia desalojada en Ourense viviendas a más de 60 kilómetros.
"DEBERÍAMOS AVERGONZARNOS"
Por su parte, el socialista Xosé Sánchez Bugallo ha reconocido que tiene diferencias con algunos aspectos de esta propuesta, pero ha justificado su voto favorable por "convicción" de que es necesario solucionar el problema de los desahucios. "Hay cinco diarios en Galicia", ha enfatizado.
Y, al igual que Cosme Pombo y Antón Sánchez, ha considerado "insuficientes" las medidas puestas en marcha por la administración. "Es una burla a los ciudadanos", ha dicho sobre el realojo de 43 familias en Galicia y sobre ofrecer viviendas alternativas a tanta distancia de su lugar residencia. "¿Cómo llevan esas familias a sus hijos al colegio?", ha evidenciado.
"Deberíamos avergonzarnos de nuestra incapacidad para encontrar una solución", ha asumido, sin dejar de hacer hincapié en que "es imposible" que una familia que subsiste con una Risga pueda pagar el coste de su vivienda y el alimento y vestido de sus hijos.
"UN SOLO DESAHUCIO ES MUCHO"
En su turno, Jaime Castiñeira ha replicado que, si bien "un solo desahucio es mucho" y "debe preocupar" a todos, ha pedido tener en cuenta que los datos sobre desalojos no incluyen únicamente viviendas ni "primeras viviendas".
A continuación, ha destacado que el Gobierno ha ampliado los supuestos en los que se paralizan los desahucios, incrementando tanto el coste de la vivienda como la renta familiar, y los programas de vivienda puestos en marcha por la Xunta.
"Es inevitable pedir más, pero la Xunta y el Gobierno están tomando medidas", ha remarcado, y ha señalado que "otras comunidades donde no gobierna el PP", como Andalucía, "encabezan las listas" en cuanto a expulsión de familias de sus viviendas.
"PROTEGER A LA PARTE MÁS DÉBIL"
Para cerrar el debate, Cosme Pombo ha replicado que la "medida" que ha tomado el PP es sanear la banca con dinero público. A modo de ejemplo, ha citado a Novagalicia Banco, que recibió casi 9.000 millones de euros para su saneamiento y ahora, tras su venta, ha obtenido más de 1.100 millones de euros de beneficio.
"Son 89 años de políticas de vivienda de la Xunta", ha lamentado, crítico, al igual que el representante de Alternativa en el debate, con que esta entidad no se haya mantenido en el ámbito público.
Y, tras apuntar que el decreto estatal de paralización de desahucios sólo atañe "al uno por ciento" de los afectados, ha remarcado que "la crisis sólo la paga la clase trabajadora" bien sea con copagos, impuestos, bajadas salariales, despidos "y ahora también con vivir en la calle". "Todo para salvar a la banca", ha reprobado, y ha exigido medidas para "proteger a la parte más débil de la sociedad".
