La iniciativa busca "revalorizar" un tipo de percebe de "escaso" valor comercial
VIGO, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
La empresa Mar de Silleiro, formada por percebeiros de las localidades pontevedresas de Baiona y A Guarda, ha iniciado la fase de comercialización de percebes envasados y de paté de percebe, productos que estarán a disposición del cliente bajo la marca '27 percebeiros'.
Estos nuevos productos han sido presentados este martes en la sede de la Fundación Cetmar en Vigo y se comercializarán a partir de ahora, puesto que ya tienen creada una página web --con una tienda on-line que estará lista en breve-- y a la espera de que lleguen los primeros pedidos de clientes. El producto empleado para paté es un percebe de morfología alargada de menor calidad que el que se vende en fresco y que en los últimos años está apareciendo cada vez más.
Así, el recurso puede ser extraído por las cofradías de Baiona, A Guarda y Bueu, para lo que cuentan con unos días concretos y con un precio fijado --este percebe no va a subasta--. Para este primer año se ha fijado la extracción de un de 6 toneladas de percebe de esta tipología, con el que se pueden realizar un total de 25.000 unidades.
Según ha explicado una de las administradoras de la empresa, Susana González, la iniciativa es de los "27 percebeiros" socios, quienes "pensamos que nuestro trabajo da mucho más de sí" y, por tanto, han buscado oportunidades para "revalorizar" este tipo de percebe y acercar la posibilidad de consumirlo a personas que no pueden acceder al fresco. De esta forma, se ha elaborado paté de percebe con y sin algas y percebe al natural con y sin uña.
Así, según las tarifas de noviembre, un tarro de paté de percebe --125 gramos de peso neto-- tiene un precio de 11 euros, mientras que uno de paté con algas --125 gramos--, 9 euros. En cuanto al percebe al natural sin uña --tarro de 110 gramos--, se podrá adquirir por 18 euros, y el percebe con uña --170 gramos-- por 20 euros.
TRAZABILIDAD Y SOSTENIBILIDAD
Susana González ha explicado que los propios socios son quienes se encargan de extraer, limpiar y seleccionar el percebe, al tiempo que ha destacado que el producto cuenta con las "mayores garantías" de procedencia, frescura, calidad y trazabilidad.
Según ha explicado, el trabajo se realiza bajo criterios de "responsabilidad" y "sostenibilidad", por lo que, a la hora del envasado se ha elegido una empresa --la conservera Antonio Pérez Lafuente, de Vilanova-- que trabaja "con la misma filosofía". De igual modo, otra de las administradoras de Mar de Silleiro, Isabel González, ha destacado que todas las labores que se desarrollan son de tipo "artesanal", incluso el etiquetado.
Por su parte, Miguel Verea, también administrador; ha destacado especialmente la apuesta por la "sostenibilidad" de este proyecto que comenzó en 2005. En este sentido, ha señalado que la iniciativa busca mejorar la calidad de vida de los percebeiros y, ante la aparición de la tipología de percebe de menor calidad que el que se destina a la venta al fresco, convertir este "problema en oportunidad".
De esta forma, ha destacado que se está sacando partido a un recurso que hasta ahora no se aprovechaba y que los días que se colecta el percebe para paté, el percebe de mayor valor "descansa", de forma que se consigue una pesquería "más sostenible".
Por su parte, la directora de Cetmar, Paloma Rueda, ha destacado la "implicación" que ha tenido la Fundación en esta iniciativa y también ha señalado la apuesta de estos percebeiros por la "revalorización" de una especie de producto de "escaso valor comercial", al tiempo que ha asegurado que los socios de la empresa "se han dejado asesorar y han entendido bien" los conceptos necesarios para que esta nueva experiencia empresarial salga adelante.
