El BNG censura el proyecto de North West Food, "ambientalmente aberrante", mientras el PSdeG cree que Mar trata de "autojustificarse"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 6 May. (EUROPA PRESS) -
El director xeral de Competitividade e Innovación Tecnolóxica, Juan Maneiro, ha lamentado que las cofradías de Muros y Noia, así como la asociación de mejilleneros de Muros-Esteiro, declinasen participar en la comisión mixta de seguimiento creada por la Administración gallega para la supervisión del cultivo experimental de las jaulas de salmón autorizadas por la Consellería do Mar en el polígono C de la ría.
El departamento que dirige Rosa Quintana se encuentra "a la espera" de una comunicación por parte de los otros dos pósitos de la ría --Porto do Son y Portosín--, y también aguarda respuesta --una vez transcurridos los 10 días preceptivos para designar a los representantes en el grupo de trabajo-- de los colectivos de 'bateeiros' de Arousa Norte y Muros-Noia, según ha explicado Maneiro.
En una comparecencia a petición propia en la comisión de pesca de la Cámara autonómica, el director xeral ha atribuido la negativa a formar parte de la comisión a un "problema de competencia por el espacio y de competencia --en el sentido económico-- mal entendida".
Por ello, ha recriminado "falta de responsabilidad" a los responsables de las cofradías y de las asociaciones de mejilloneros, tras defender que, aunque se trata de "una situación caótica y heredada", la consellería cree ahora en la viabilidad "económica, social y medioambiental" del cultivo de salmón en las rías gallegas.
North West Food, que recibió en agosto de 2008, del Ejecutivo bipartito, una autorización para implantar durante dos años sendos artefactos para la cría de este pescado en Arousa, obtuvo una prórroga de un año en enero de 2011 por parte del actual Gobierno.
Los populares, que en la oposición criticaron la acuicultura de salmón por considerarla nociva para el ecosistema y otras especies, decidieron, al frente de la Xunta, trasladar las instalaciones a Muros por las condiciones más "apropiadas", al contar con un polígono "ya creado" y "en la boca norte de la ría", lo que garantiza que cualquier "residuo" se dirija "siempre hacia fuera", ha explicado Juan Maneiro.
LA AFECCIÓN AL MARISCO, "CASI IMPOSIBLE"
Al respecto, ha sentenciado que es "casi imposible" que los viveros flotantes destinados a la cría de salmón "puedan afectar a los bancos marisqueros" de Muros y Noia.
Además, Maneiro ha valorado el "límite" de producción impuesto por la propia compañía --con parte de su capital procedente de Noruega--, de 10 kilogramos por metro cúbico, frente a los topes de más de 40 kilos fijados en "el mal ejemplo" de Chile.
A mayores, el responsable de Mar ha anunciado la próxima creación de un nuevo grupo, conformado por "especialistas" del Colegio de Biólogos, y el establecimiento de una página web "con la información sobre el seguimiento" del proceder de North West Food en Muros C.
"No estuvimos ni estamos ahora a favor de la instalación de las jaulas", ha subrayado el director xeral al inicio de su intervención y, sin embargo, ha concluido "reivindicando el derecho de Galicia a, por lo menos, evaluar este cultivo como una fuente de riqueza".
En caso de que, durante esta primera fase experimental --el proyecto prevé la colocación de hasta 20 jaulas-- "se demuestre que no es viable económica, social y medioambientalmente, que nadie dude que la experiencia se dará por finalizada", ha constatado Maneiro.
"MENOS EXCUSAS"
Por su parte, el portavoz del BNG en el debate ha pedido al dirigente de la Consellería do Mar que ponga "menos pretextos y menos excusas", al interpretar que, "sea o no heredada", la política pesquera del PPdeG representa "una apuesta" por este tipo de cultivo.
Frente a esto, el diputado nacionalista ha exigido el respecto al principio de "cautela y prevención", ante un problema, ha dicho, "reconocido" en los informes de la propia consellería.
El proyecto empresarial de North West Food es "políticamente impuesto, socialmente inasumible y ambientalmente aberrante", ha censurado Lobeira, por lo que ha instado a la Xunta a "aplicar el cuento del diálogo con el sector". "No quieren esas jaulas, y ustedes no tienen derecho a hacer lo que están haciendo, por mucha mayoría absoluta que tengan", ha concluido.
"TIENE DELITO"
En estos reproches ha coincidido Marisol Soneira, portavoz del PSdeG en la comisión cuyo punto único ha consistido en la comparecencia de Juan Maneiro. "Tiene delito", ha recriminado la parlamentaria, al atribuir el discurso del director xeral a "un intento de utilizar la Cámara para autojustificarse".
En esta dirección, Soneira ha achacado a la consellería una forma de adoptar las decisiones "en base a prejuicios sectarios", ya que, bajo su punto de vista, para Mar existen "protestantes de primera y protestantes de segunda". Ante los primeros, rectifica y ante los segundos, no, ha explicado.
Por último, la parlamentaria del PPdeG en el debate, Soledad Piñeiro, ha culpado a los nacionalistas de ser "cómplice necesario" de la anterior Consellería de Pesca y ha indicado que "el porqué" de su "cambio de opinión" ahora "aún no lo explicaron".
