El juez condena a la clínica Nuestra Señora del Rosario (Ibiza) al pago de 42.000 euros por mala praxis profesional

Actualizado: domingo, 6 abril 2008 14:57

PALMA DE MALLORCA, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -

El juzgado de primera instancia número dos de Ibiza ha condenado a la Clínica Nuestra Señora del Rosario al pago de 42.000 euros a los familiares de una paciente, a la cual no se prestó la debida asistencia médica sanitaria, incurriendo en un "error de diagnóstico", lo que propició su posterior fallecimiento, por lo que se declara al centro médico "responsable civil" de la muerte de la enferma por causa de "mala praxis profesional".

Así lo recoge la sentencia emitida por este juzgado el pasado 21 de enero de 2008, a la que tuvo acceso Europa Press, y en la que resuelve que la paciente, de 85 años, fue víctima de una "negligencia médica" cuando tras ingresar de urgencias en la citada clínica con un fuerte dolor abdominal no se le practicaron las "pruebas diagnósticas precisas" y se le dio el alta a las pocas horas con la prescripción de "reposo" y sin siquiera haberle realizado una analítica de sangre.

La paciente sintió un empeoramiento de su estado dos días después, lo que la llevó a acudir a urgencias del Hospital Can Misses. Allí, se le practicó una analítica, lo que permitió diagnosticar "una infección grave en el abdomen y una perforación de víscera". Tras la gravedad del diagnóstico, el Hospital operó a la paciente, la cual falleció catorce días después, afectada de una grave infección generalizada en todo su organismo.

Sus hijos, asistidos por el letrado Antonio Martínez, del Bufete Coca, de Palma, presentaron una demanda contra la Policlínica al sospechar que el centro no había seguido el protocolo adecuado. Unas sospechas que fueron confirmadas por el juez, quien en su dictamen expone que si la clínica Nuestra Señora del Rosario hubiera realizado "al menos" un análisis de sangre "habría llegado al diagnóstico adecuado" y, en consecuencia, hubiera practicado a la paciente la operación pertinente.

Por tanto, la sentencia judicial concluye que el centro no siguió el protocolo adecuado en esos casos y por ello declara a la clínica ibicenca "responsable civil" de la muerte de la mujer y la condena al pago de 42.000 euros a cada uno de los demandantes en concepto de daños y perjuicio morales sufridos por el fallecimiento de su madre.