Menorca acumula el 85% de las incidencias comunicadas a Endesa en Baleares para aislar las torres eléctricas

MENORCA 17 May. (EUROPA PRESS) -

Menorca acumula el 85 por ciento de las incidencias comunicadas en Baleares a Endesa para el aislamiento de los soportes de torres eléctricas, que son revisados por la Agencia Menorca Reserva de Biosfera junto con Agentes de Medio Ambiente del Govern, quienes cada año analizan miles de estos puntos para determinar cuáles son peligrosos para las aves.

La revisión de este año se está llevando a cabo a lo largo de los meses de primavera y verano para aquellos soportes que aún no han sido supervisados. Una vez realizada la revisión, el Govern envía a Endesa los datos solicitados para que realice el aislamiento de los puntos detectados en el plazo máximo de un mes. El objetivo final es proteger todas las torres eléctricas que puedan suponer un peligro de electrocución para las aves.

El acuerdo con la eléctrica está en marcha desde hace más de cinco años, y ha permitido el aislamiento de miles de puntos hasta la fecha. Según datos del último año a nivel balear, Menorca comunicó el 85 por ciento de incidencias, Mallorca el 14 por ciento y Eivissa el 1 por ciento.

Desde el Consell de Menorca han indicado que la electrocución en torres eléctricas es una amenaza que afecta a una parte importante de las especies de aves que viven en la Reserva de Biosfera de Menorca. Sin embargo, han reconocido que, aunque es un problema conocido desde hace muchos años, su solución "no está siendo ni rápida ni fácil", y afecta además a algunas de las especies más amenazadas del territorio, como la gran mayoría de aves rapaces: el milano real, el águila pescadora, el azor, el halcón peregrino, el cernícalo o el búho, así como a otras especies como la gaviota de Audouin o el cuervo.

Con más de 28 líneas de distribución y una longitud cercana a los 1.000 kilómetros, las líneas eléctricas en Menorca están presentes en todos los rincones y hábitats de la isla, afectando a su rica biodiversidad y convirtiéndose en la principal causa de mortalidad del milano real, una especie catalogada en España como en peligro de extinción.

Durante el año 2023 se ha realizado el control de once líneas eléctricas y un total de 2.535 soportes, para ello se ha contado con la colaboración de los agentes de medio ambiente del Govern. En 93 de estos soportes se han encontrado aves muertas, un total de 119 ejemplares. La especie más abundante encontrada muerta ha sido la gaviota de Audouin, con 41 ejemplares, seguida del cuervo, con 24 ejemplares, y del milano real, con cinco ejemplares. También se han encontrado otras especies como azores, halcones peregrinos y lechuzas.

La administración insular ha explicado que no todas las líneas eléctricas tienen la misma peligrosidad, ya que esta depende de las características técnicas del soporte, de su situación orográfica, del hábitat donde se encuentren, y de la cantidad de aves que haya en la zona, aunque el factor clave en la peligrosidad son las características técnicas del soporte.

Para cuantificar esta peligrosidad se utiliza el número de aves encontradas muertas por cada 100 soportes revisados. Los datos muestran que este valor varía entre 30 aves muertas por cada 100 soportes en la línea de la Mola de Maó, o 23 aves muertas en la línea desde Alaior hacia el sur, hasta valores muy bajos de una o dos aves muertas en la línea de Son Bou o en la línea de Ferreries.

"Las actuaciones anuales de control de las líneas eléctricas tienen un efecto importante sobre la conservación de las rapaces insulares, al reducir el número de aves muertas por electrocución. Sin embargo, el objetivo debería ser conseguir aislar todos los soportes de la isla y evitar que cualquier ave muera por electrocución", han concluido.