Palma acogerá los próximos días 19 y 20 un congreso sobre las repercusiones de la violencia doméstica en los menores

Actualizado: miércoles, 11 noviembre 2009 13:27

El acto, que será gratuito, también versará sobre los nuevos modelos de familia

PALMA DE MALLORCA, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -

La capital balear acogerá los próximos días 19 y 20 de noviembre el II Congreso estatal sobre la defensa de los menores en las crisis de pareja, que desarrollará cinco conferencias y dos mesas redondas centradas en cómo afecta la violencia doméstica en los hogares a los niños, así como en los nuevos modelos de familia que existen actualmente.

La consellera de Asuntos Sociales, Promoción e Inmigración, Fina Santiago, subrayó que abordarán tanto el modelo de unidad familiar existente en el Islam, como el de pareja en las familias inmigrantes que residen en Baleares. Asimismo, habrá conferencias en las que se hablará de los hogares monoparentales después de las separaciones y en cómo afecta la religión en el modelo de pareja.

La iniciativa, que se desarrollará gratuitamente en la Universitat de les Illes Balears (UIB), está dirigida a estudiantes y profesionales y tiene un máximo de 220 plazas, no obstante, ya hay cerca de 200 inscritos.

Preguntada sobre la posibilidad de que la crisis provoque una dificultad a la hora de que las parejas se divorcien y, consecuentemente, puedan aumentar los casos de maltrato, la consellera recordó que Baleares presenta una de las tasas de separaciones más elevadas ya que las mujeres presentan una ocupación alta y, por tanto, poseen "independencia económica".

Así, Santiago pese a reconocer que la actual situación económica podría ocasionar que las decisiones de separación no se ejecuten, indicó que no hay datos en Baleares sobre este aspecto. No obstante, el director de la Oficina de Defensa de los Derechos del Menor (Oddm), Antoni Bennàssar, remarcó que la violencia doméstica es un problema que afecta a "todas las clases sociales".

Por otra parte, la titular de Asuntos Sociales subrayó que los menores que viven en un hogar donde su padre o madre sufre violencia doméstica acaban siendo también víctimas, aunque no reciban un maltrato físico directo. En este sentido, señaló que los niños acaban aprendiendo a "resolver el conflicto desde la violencia", y, además, pueden sufrir otras secuelas como baja autoestima, problemas escolares o falta de concentración.

La primera edición del congreso que se desarrolló el pasado año versó sobre la alienación parental, es decir, la manipulación que realiza uno de los cónyuges tras una ruptura matrimonial para que el hijo en común tenga una imagen distorsionada del otro progenitor, y sobre la guardia y custodia de los menores.