PALMA, 21 May. (EUROPA PRESS) -
La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares iniciará el lunes el juicio contra cinco acusados de estafar más de 800.000 euros a los socios de una empresa. La Fiscalía pide para todos ellos penas que suman 30 años de cárcel.
Los hechos se remontan a julio de 2008, cuando dos de las acusadas constituyeron la sociedad, siendo éstas las administradoras, mientras que el marido y el hijo de una de ellas, también acusados, ejercían distintas funciones en la mercantil. El quinto procesado es un hombre que adquirió participaciones de la misma.
Según el escrito del fiscal, entre 2010 y 2012, los acusados llegaron a apropiarse indebidamente más de 800.000 euros procedentes de las ampliaciones de capital que adquirían mediante nuevos socios. La suma total de los importes distraídos en propio beneficio asciende concretamente a 814.961 euros, siendo beneficiarios cada uno de los cinco procesados en diferentes cantidades.
Para ocultar la verdadera situación financiera de la sociedad al resto de socios, los encausados realizaban anotaciones erróneas en las cuentas contables, que de haberse realizado correctamente hubieran disminuido los resultados de los ejercicios y, por ende, el patrimonio neto de la sociedad, dejando en evidencia que la mercantil estaba en causa de disolución.
El fiscal considera los hechos constitutivos de un delito continuado de estafa o, alternativamente, de un delito continuado de apropiación indebida, así como de un delito societario.
Por ello, pide para cada uno de los acusados la pena de seis años de cárcel y multas que ascienden a los 18.000 euros. Además, tres de ellos deberán responder sobre los 100.000 euros detraídos de la sociedad y del resto de la cuantía (759.952 euros) responderán todos los acusados.
