Afganistán.- El CICR advierte de que la situación humanitaria en Afganistán "ha empeorado desde hace un año"

Actualizado: martes, 12 junio 2007 12:14

Advierte de que cada vez es más difícil realizar acciones humanitarias "fuera de las grandes ciudades"

GINEBRA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) aseguró hoy que la situación humanitaria en Afganistán "ha empeorado desde hace un año" y advirtió de que en el "contexto polarizado" que se vive este país, para cuyos habitantes "es sumamente difícil llevar una vida normal", es "cada vez más difícil" realizar acciones humanitarias fuera de las grandes ciudades.

"La situación humanitaria en Afganistán ha empeorado desde hace un año", declaró hoy en Ginebra el director de Actividades y Operaciones del CICR, Pierre Krahenbuhl, citado en un comunicado de la organización.

"Las personas civiles sufren muchísimo a causa de las crecientes amenazas contra su seguridad", advirtió el responsable del Comité, quien alertó de que a causa del "mayor número de ataques suicidas y de bombas en los bordes las carreteras", de los "frecuentes bombardeos aéreos" y de la falta de servicios básicos, "para un ciudadano afgano es sumamente difícil llevar una vida normal".

Desde 2006, el conflicto entre las fuerzas afganas e internacionales y la oposición armada se ha recrudecido considerablemente en el sur y el este del país y se extiende hacia el norte y el occidente, lo cual ha tenido como consecuencia un constante incremento de víctimas civiles, según el CICR.

"En un contexto siempre polarizado, como el de Afganistán, es cada vez más difícil realizar acciones humanitarias fuera de las grandes ciudades", lamentó el Comité. Aparte, según Krahenbuhl, "los servicios sanitarios se han ido deteriorando paulatinamente en zonas remotas de Afganistán, donde sigue habiendo muchas necesidades sin atender, y el acceso a las personas que más urge prestar ayuda es el más difícil".

En el sur del país, donde los enfrentamientos armados son regulares y frecuentes, la población local sufre "enormemente", según el comunicado. Miles de personas han tenido que huir de la región y siguen desplazándose en busca de lugares más seguros. La falta general de seguridad afecta tanto a la población rural como urbana.

"Vivir aquí es casi insoportable", dice Khateera, de 29 años, citada en el comunicado. Su familia, formada por seis personas, tuvo que trasladarse a la casa de un pariente. "No teníamos manera de ganarnos la vida, y cuando mi tío nos echó de su casa, nos quedamos en la calle. En invierno uno de mis seres queridos murió de frío", relató.

SOBRE EL TERRENO

En estas circunstancias, el CICR mantiene un diálogo estructurado y claro con todas las partes en el conflicto --autoridades afganas, fuerzas internacionales y oposición armada-- "para promover la aceptación y el respeto de su acción humanitaria, independiente y neutral, así como para obtener más amplias garantías de seguridad y un mayor acceso a las víctimas del conflicto en todo el país", según el comunicado.

Aparte, el CICR y la Cruz Roja Afgana han incrementado sus esfuerzos para prestar protección y asistencia a los más vulnerables, especialmente mediante ayudas a a los centros sanitarios locales para que puedan atender a los heridos de guerra, cuyo número no cesa de aumentar, en el sur y el este del territorio.

Además, el CICR visita a un número cada vez más mayor de personas detenidas en poder de las autoridades afganas o de las fuerzas internacionales en relación con el conflicto armado (2.424 en el último año), a fin de cerciorarse de que reciben un trato humano y según lo dispuesto en el Derecho Internacional Humanitario.