KABUL 13 May. (EP/AP) -
Fuerzas afganas y de la OTAN acabaron con la vida de 55 presuntos talibán en dos operaciones realizadas en la frontera con Pakistán, en las que también resultó muerto un oficial de Policía, mientras otro agente de la ley falleció y otros dos resultaron heridos a consecuencia de la explosión de una bomba en la provincia de Nangarhar.
Ejército y Policía afganos, en colaboración con fuerzas de la OTAN, llevaron a cabo las operaciones en las localidades de Bermel y Gayan, en la fronteriza provincia de Patika, en las que perdieron la vida 15 y 40 supuestos insurgentes, respectivamente, según el portavoz del Gobernador de la provincia, Ghamai Khan.
Sin embargo, sólo han sido recuperados hasta el momento los cuerpos sin vida de diez presuntos milicianos, y la cuenta de fallecidos no ha sido verificada de forma independiente. Según Khan, los guerrilleros "planeaban atacar el puesto de control en Gayan", ante lo que se lanzó una "operación con ataque aéreo".
Por su parte, el policía que perdió la vida en Nangarhar resultó víctima de una explosión de una bomba de carretera cerca de un coche patrulla, según el jefe de la provincia de Bati Kot, Mohammad Akrem.
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