BERLÍN, 17 Abr. (De la corresponsal de EUROPA PRESS Clara U. Molina) -
La canciller alemana Angela Merkel se entrevistó esta mañana con el cantante irlandés de la banda musical U2, Bono. Ante las peticiones del artista, Merkel prometió al cantante que África tendrá un papel primordial en la cumbre de los siete países más industrializados del mundo más Rusia en junio y que tendrá lugar en la localidad de Heiligendamm, al norte de Alemania.
El cantante y activista por la paz declaró reconocer en Angela Merkel la "voz de los pobres" dada su presidencia de turno del G-8, informa el semanario alemán "Stern" en su edición "on-line". Por esta razón el irlandés pidió especialmente a Merkel que África tenga en el encuentro del 6 al 8 de junio un lugar central en la agenda de los países más industrializados del planeta.
Durante el encuentro del G-8 en Heiligendamm temas a tratar serán la mejora de las inversiones en medio ambiente, reforzar el desarrollo sostenible así como la correcta dirección política en África, según comunicó un portavoz del Gobierno alemán hoy en la capital federal.
"En mi opinión (Merkel) está preparada para luchar por los pobres del mundo siempre y cuando logre convencer a los contribuidores alemanes de impuestos de que el dinero no irá a parar a gobiernos corruptos" apuntó Bono. "Es una mujer muy sabia. Ella sabe que si no cumpliéramos nuestros compromisos entraríamos en una crisis de credibilidad".
La canciller alemana se mostró especialmente interesada en la formación educativa de las mujeres y jóvenes africanas así como la lucha contra el sida. La política destacó el honorable "compromiso personal" de Bono en las cuestiones de desarrollo, en especial en lo que concierne a África.
El músico de U2 criticó que los países del G-8 no cumplieran los compromisos hechos en materia de ayuda al desarrollo. En 2005 el grupo se comprometió en el encuentro del grupo en Geneagles (Escocia) a doblar la ayuda económica anual destinada al desarrollo para 2010 hasta alcanzar los 50.000 millones de dólares.
El G-8 está compuesto por Estados Unidos, Japón, Alemania, Francia, Gran Bretaña, Canadá, Italia y Rusia.
