KABUL, 15 Nov. (Reuters/EP) -
El número de soldados de la OTAN que han fallecido como consecuencia de un combate que mantuvieron este domingo a raíz de un ataque de un grupo de insurgentes en el este de Afganistán ha aumentado a cinco, según un comunicado publicado por la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF), la misión de la Alianza Atlántica en este país.
En un primer momento, la ISAF dijo que habían muerto tres de sus efectivos, pero el nuevo balance convierte este ataque en el que ha causado más bajas entre las fuerzas internacionales desde el pasado 18 de mayo, cuando un atentado suicida dirigido contra un convoy de la OTAN acabó con la vida de seis soldados --incluidos cinco estadounidenses-- y doce civiles afganos en Kabul.
Aunque la ISAF no suele informar de la nacionalidad de los militares fallecidos, la mayoría de los efectivos desplegados en el este son estadounidenses. En cuanto al lugar donde ocurrieron los hechos, los talibán aseguran en su página web que mantuvieron enfrentamientos con las fuerzas de la OTAN durante varias horas en la provincia de Kunar.
Además, este domingo murieron siete efectivos de la OTAN en el sur Afganistán, cinco por un ataque insurgente y otros dos --un británico y un danés-- por sendos atentados con explosivos. Estas bajas militares se suman a otras tres registradas el sábado.
Unos 645 soldados extranjeros, la mayoría estadounidenses (440), han muerto en Afganistán solo en 2010, el año en que se han producido más bajas desde que comenzó la guerra. Durante todo el conflicto han fallecido al menos 2.213, según la página web 'iCasualties.org'.
Por otro lado, varios miembros de una fuerza policial afgana se enfrentaron este lunes con unos milicianos que habían atacado una torre de telecomunicaciones en Kunduz, en el noreste del país, y, según el jefe de la Policía en la provincia, Abdul Rahman Sayedjili, han muerto nueve policías y ocho insurgentes.
Mientras, en Asadabad, la capital de la provincia nororiental de Kunar, los talibán dispararon cohetes este lunes contra una base de la ISAF, según han explicado ellos mismos.
La violencia en Afganistán ha alcanzado su nivel más alto desde que las fuerzas lideradas por Estados Unidos derrocaran a los talibán en 2001. Esto se debe principalmente a que la OTAN ha intensificado sus operaciones contra la insurgencia y a que los comandantes estadounidenses y de la ISAF han logrado éxitos notables recientemente.
Ante esta situación, cada vez son más los que abogan por llegar a un acuerdo con los milicianos.
En la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros de la OTAN que se celebrará a partir de este viernes en Lisboa, el tema principal será la guerra de Afganistán. Además, el presidente estadounidense, Barack Obama, revisará el mes que viene su estrategia en el conflicto.
