WASHINGTON, 26 Sep. (Reuters/EP) -
Un informe anual de la policía federal estadounidense, el FBI, señala que en 2015 se registró un incremento de los crímenes violentos con respecto al año anterior, en particular en las grandes ciudades, aunque subrayan que estos niveles están aún muy por debajo de los de la década de 1990.
El informe recoge un total de 1.197.704 delitos violentos --incluidos homicidios-- registrados en 2015, 44.682 más que el año anterior, mientras que en 1996 se alcanzaron los 1.688.540.
El documento contabiliza un total de 15.696 asesinatos, por encima de los 14.164 de 2014. Estas cifras truncan una tendencia a la baja de los delitos violentos durante los años 2013 y 2014, aunque el 2015 la cifra fue menor que en 2012 y los años anteriores, destaca el FBI.
En cuanto a la localización de estos delitos, éstos se concentran en los barrios marginales de las grandes ciudades como Chicago, Baltimore y Washington.
El director del FBI, James Comey, ya había advertido de que se produciría un incremento del crimen debido a las críticas a las tácticas policiales que habrían causado una mayor cautela de los agentes a la hora de utilizar tácticas agresivas.
Un analista de la Escuela de Derecho de Harvard, Robert Smith, ha advertido que la publicación de este informe precisamente en el día del primer debate presidencial de la campaña podría convertirlo en "un partido de fútbol político".
La candidata demócrata, Hillary Clinton defiende un mayor control sobre la posesión de armas como fórmula para reducir la violencia y propone instaurar unas directrices comunes para la actuación policial en lo relativo al uso de la fuerza para todo el país.
En cambio, su rival republicano, Donald Trump, aboga por una mayor dureza por parte de las fuerzas de seguridad y defiende prácticas como el "alto y cacheo", por el que los agentes tendrían derecho a dar el alto a cualquier transeúnte y a cachearlo. En la práctica, cuando se ha aplicado, la gran mayoría de los cacheados eran negros y latinos.
