Bahréin y Emiratos expresan su respaldo al Gobierno y aplauden las palabras del monarca saudí

Actualizado: martes, 17 diciembre 2013 20:41

MADRID, 17 Ago. (EUROPA PRESS) -

Los gobiernos de Bahréin y Emiratos Árabes Unidos (EAU) han expresado este viernes su respaldo a los comentarios vertidos por el rey Abdulá de Arabia Saudí, quien ha hecho un llamamiento a todos los árabes a permanecer unidos contra los "intentos de desestabilizar" Egipto en un mensaje de apoyo al actual Gobierno interino del país y su presidente, Adli Mansur.

En su comunicado, las autoridades bahreiníes han destacado que "la postura de Abdulá es una respuesta a las responsabilidades históricas ante la nación árabe y a la necesidad de fortalecer la solidaridad y la cohesión entre los países árabes para activar una acción conjunta para salvaguardar los intereses comunes".

Así, han resaltado "el derecho legítimo de Egipto a defender los intereses vitales de su población y protegerla", así como a "hacer frente a los intentos de interferir en sus asuntos internos", según ha informado la agencia estatal bahreiní de noticias, BNA.

Por su parte, EAU ha mostrado su "total respaldo" al rey saudí y ha sostenido que "su posición decidida está dirigida contra los que prendieron el fuego de la sedición y el caos", según un comunicado recogido por la agencia estatal emiratí de noticias, WAM.

Bahréin y EAU se han unido así a Jordania, que ha expresado durante la jornada su apoyo a los "esfuerzos de Egipto por imponer el mandato de la ley" y "combatir el terrorismo" en el país para "restaurar la seguridad y la estabilidad para la población".

Asimismo, el titular de la cartera, Naser Judeh, ha aplaudido los comentarios vertidos por el rey Abdulá de Arabia Saudí, según ha informado la agencia estatal jordana de noticias, Petra.

Arabia Saudí era un aliado cercano al expresidente egipcio Hosni Mubarak y ha tenido una complicada relación a lo largo de la historia con la formación islamista Hermanos Musulmanes. Tras el derrocamiento de Mohamed Mursi aprobó un paquete de ayuda para Egipto de 5.000 millones de dólares (más de 3.900 millones de euros).

OLA DE VIOLENCIA

El país se ha visto sumido en una ola de violencia tras el desmantelamiento forzoso el miércoles de las acampadas que protagonizaban miles de seguidores del expresidente Mohamed Mursi, derrocado el 3 de julio a través de un golpe de Estado, que se saldó con al menos 580 fallecidos y alrededor de 4.000 heridos.

La organización islamista Hermanos Musulmanes aseguró que más de 4.500 personas murieron durante la jornada del miércoles en diversos puntos del país, según su portavoz Gehad el Haddad. En este sentido, especificó que más de mil personas perdieron la vida en los disturbios que tuvieron lugar fuera de El Cairo.

La violencia se extendió rápidamente a otras ciudades egipcias. En Menia, los choques entre uniformados e islamistas se han cobrado la vida de 41 personas, mientras que en Fayum han dejado 35 fallecidos, en Ismailia 15 y en Alejandría 10.

Además, de acuerdo con las cifras del Ministerio de Interior, un total de 534 personas han sido detenidas en relación a estos disturbios. Su titular, Mohamed Ibrahim, ha negado que haya ocho líderes de Hermanos Musulmanes entre los arrestados.

En este contexto, el Gobierno ha decretado el estado de emergencia en todo el país durante un mes y ha ordenado un toque de queda nocturno --de las 19.00 a las 6.00 horas-- en once provincias, incluidas las principales ciudades, para tratar de contener la violencia.

'VIERNES DE LA IRA'

La cifra de víctimas ha aumentado este viernes tras la represión por parte de las fuerzas de seguridad de las manifestaciones convocadas por Hermanos Musulmanes para protestar contra las actuales autoridades del país y defender la legitimidad de Mursi.

Sólo en El Cairo, una ciudad tomada por el Ejército y escenario de los choques más intensos, alrededor de 50 personas han muerto, según fuentes de los servicios de seguridad. Un testigo de la agencia Reuters ha visto 27 cadáveres tendidos junto a una mezquita de la capital egipcia, aparentemente víctimas de disparos de bala y perdigones.

En Alejandría, la segunda ciudad del país, han muerto 16 personas y otras 140 han resultado heridas, según la televisión estatal. A estas víctimas se suman otras cinco en Fayum, ocho en Damietta, cuatro en Ismailia, cuatro en Port Said, cuatro en Suez y cuatro en Tanta.

Las críticas se dirigen principalmente contra el jefe del Ejército, Abdelfatá al Sisi, al que atribuyen la responsabilidad del golpe que expulsó a Mursi del poder. "El pueblo quiere la ejecución del carnicero", ha afirmado Mustafa Ibrahim, manifestante de 37 años.

Leer más acerca de: