Bosnia entierra a 284 víctimas de las fuerzas serbobosnias ocultadas en la mayor fosa común de la guerra

Una pareja de bosnios en el funeral conjunto de Prijedor
DADO RUVIC / REUTERS
Actualizado: miércoles, 8 julio 2015 10:09

KOZARAC (BOSNIA HERZEGOVINA), 21 Jul. (Reuters/EP) -

Un total de 284 personas que fueron ejecutadas por las fuerzas serbobosnias en julio de 1992 en Prijedor, en el noroeste de Bosnia Herzegovina, y cuyos cadáveres fueron ocultados en la que está considerada como la mayor fosa común de la guerra, Tomasica, han sido enterradas este domingo tras un funeral conjunto en un campo de fútbol en la localidad de Kozarac.

Miles de familiares de Bosnia y de toda Europa han asistido al funeral por las víctimas sepultadas en esta fosa común, en su mayoría bosnios musulmanes, incluidos los 21 miembros de una misma familia, aunque también fueron ejecutados bosnios croatas.

Los cientos de féretros cubiertos con tela verde, el color del islam, han recibido el último adiós de sus familiares, pasados 22 años de la masacre cometida por las fuerzas serbobosnias. "Creo que mañana habrá paz, cuando todo esto acabe", ha afirmado Amela Kadiric, una mujer que llegó desde Países Bajos para enterrar a su padre y a tres de sus tíos, ejecutados por las fuerzas serbobosnias en la región de Prijedor.

Unas 100.000 personas murieron en la guerra de Bosnia, que llevó a decenas de miles a abandonar su país en busca de un refugio seguro. Preguntada sobre el número de familiares de su familia en sentido extenso que murieron en esta región, Kadiric ha asegurado que "nadie lo sabe".

Los restos mortales de más de 430 personas fueron encontrados el otoño pasado en una fosa común en Tomasica, cerca de la localidad de Prijedor. La fosa era bastante profunda y el terreno era arcilloso, lo que ha hecho que muchos de los cuerpos se encontraran bien conservados.

Los relatos de los testigos apuntan que en torno a un millar de personas fueron ejecutadas y lanzadas a una enorme fosa común, de donde fueron posteriormente desenterrados para volver a sepultarlos en otras fosas más pequeñas.

La región de Prijedor fue un bastión de las fuerzas serbobosnias, que mataron a más de 3.000 musulmanes bosnios y bosniocroatas, provocando la huida de miles de personas de sus hogares. Algunas de las víctimas fueron torturadas y asesinadas en campos de detención y otras murieron en sus casas, unos crímenes por los que un tribunal ha condenado a 16 serbobosnios a 230 años de prisión.

Pasados casi 20 años del final de la guerra, Bosnia Herzegovina continúa profundamente dividida, organizada en torno a dos regiones autónomas, la Federación de bosniacos y croatas y la República Srpska, unidas por un Gobierno central con escasas competencias.

La Federación de Bosnia Herzegovina ha declarado este domingo como día de luto por el funeral de Prijedor, algo que no ha hecho la República Srpska, en la que se enmarca esta región del noroeste del país.

Tras el funeral islámico, los féretros han sido trasladados a seis cementerios locales. Samir Karupovic, que ahora vive con su madre en Croacia, tenía 17 meses cuando su padre fue asesinado por fuerzas serbobosnias en julio de 1992 junto a otras 1.846 personas en sólo tres días.

En la aldea de Biscani, los serbobosnios mataron a 218 personas en un solo día, incluios 44 miembros de la familia Hegic, según las autoridades bosnias. 21 de los fallecidos fueron encontrados en la fosa de Tomasica en otoño pasado y han sido enterrados este domingo.

Entre ellos estaban cinco hijos y el marido de Emina Hegic, que ahora tiene 83 años, vive en Estados Unidos y su familia ha decidido no contarle el hallazgo de los cuerpos y el funeral de este domingo por temor a su reacción. Suad Tatarevic ha enterrado a seis hermanos y a su padre junto a otros cinco familiares encontrados en la fosa.

"Hemos vivido con esperanza durante 22 años y ahora tenemos que afrontar que se han ido", ha dicho Tatarevic. "Al menos podremos visitar sus tumbas. Es nuestra tierra, nacimos aquí, aquí seremos enterrados", ha concluido.

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