BEIRUT, 15 Feb. (Reuters/EP) -
Al menos 50 milicianos y 43 soldados han muerto en los intensos combates registrados en los últimos días entre fuerzas leales al Gobierno del presidente Bashar al Assad y las milicias rebeldes en el sur de Siria, según ha informado este domingo el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH). El Ejército intenta tomar el triángulo entre las ciudades de Damasco, Deraa y Quneitra.
El grupo informa de una ofensiva a gran escala de las fuerzas gubernamentales, que cuentan con el apoyo iraní y de milicianos de Hezbolá. El sur del país era una de las pocas regiones en las que los grupos insurgentes no yihadistas tenían un espacio propio bajo su control.
Además, el director del OSDH, Rami Abdulrahman, ha advertido de que los combates posiblemente se intensificarán en los próximos días ante la mejoría de las condiciones meteorológicas. "Habrá bombardeos del Ejército ahora que el tiempo es mejor. Con los bombardeos van a poder avanzar", ha explicado.
En concreto, unos 5.000 militares participan en esta ofensiva, ha explicado Abdulrahman. Su grupo tiene la sede en Londres, pero cuenta con una amplia red de informadores dentro de Siria.
Fuentes de ambos bandos han confirmado la ofensiva, cuyo objetivo último sería blindar Damasco ante cualquier posible ataque. "La situación sigue siendo de choque y huida", ha relatado un portavoz del grupo insurgente Alwiyat Seif al Sham, integrante del Frente Sur de la alianza rebelde apoyada por Estados Unidos y sus aliados de la zona.
El propio OSDH ha informado del balance de muertos del sábado: 124. Entre ellos hay 5 civiles, 12 milicianos rebeldes, 17 combatientes no islámicos, 26 soldados regulares, 7 voluntarios de las Fuerzas Nacionales de Defensa, 19 rebeldes no identificados, 12 milicianos del Estado Islámico y 9 combatientes extranjeros aliados del régimen.
