SHANGAI (CHINA), 4 Dic. (EP/AP) -
Las autoridades chinas están investigando una serie de reclamaciones presentadas contra un inhalador comercializado como un producto de ayuda al fumador que quiere dejar el hábito del tabaco pero que, según la denuncias, podría contener elevados niveles de nicotina perjudiciales para la salud de sus usuarios.
"Estamos esperando los resultados oficiales de las autoridades sanitarias chinas" sobre las pruebas que se le están realizando al producto, anunció hoy un funcionario de las autoridades de Industria y Comercio del país, quien confirmó que el inhalador 'Ruyan', palabra que significa "como fumar" en chino, está siendo analizado.
Según esta fuente, si se confirma que es perjudicial para la salud de quienes lo utilizan, las autoridades del país "retirarán la publicidad y prohibirán el producto".
Un anuncio de 'Ruyan' que se puede encontrar en el portal de internet 'Youtube', en Alemania, muestra a un grupo de felices comensales disfrutando de sus inhaladores mientras que a otro individuo que intenta encender un cigarrillo se le prohíbe hacerlo por encontrarse en una zona del restaurante para no fumadores.
El debate sobre la seguridad de este producto, conocido como el Cigarro electrónico-atomizante 'Ruyan', surgió el mes pasado, cuando los medios de comunicación estatales informaron de que un inhalador contenía unos 18 miligramos de nicotina, mientras que un cigarrillo contiene una media de 1,2 miligramos de esta sustancia.
El fabricante de inhalador, la compañía Beijing SBT Ruyan Corp, informó de que el inhalador más potente contiene una cantidad de nicotina equivalente a la de un paquete completo de cigarrillos. A los usuarios del producto se les recomienda que utilicen inhaladores cada vez menos potentes como sustituto del tabaco antes de dejar el hábito definitivamente.
La compañía aseguró que su producto es menos perjudicial que el tabaco porque contiene sólo nicotina y no otros productos químicos que hacen daño a la salud de los consumidores y que se encuentran en el cigarrillo. Además, señalan que el inhalador es un prometedor método para ayudar a los 350 millones de fumadores que hay en China a dejar el tabaco. Antes de la polémica, el producto era considerado como "una innovación nacional" en favor de la "salud pública".
Cerca de un millón de chinos mueren al año por causas relacionadas con el tabaquismo, un número de fallecidos que podría triplicarse en 2025, según señalan las autoridades sanitarias del país. Por este motivo, el Gobierno se ha comprometido a prohibir la construcción de nuevas fábricas de tabaco pero está siendo lento en actuar contra una industria que generó casi 160.000 millones de yuanes (unos 20.000 millones de dólares) en impuestos el pasado año.
