BEIJING, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
La prensa oficial china informó hoy de que han aumentado en su territorio el número de actividades "hostiles" e independentistas emprendidas por organizaciones extranjeras con las que se intenta captar a los jóvenes de Xinjiang, región del oeste de China con un fuerte movimiento nacional.
"Fuerzas hostiles del exterior de China aumentaron sus esfuerzos para instigar a los jóvenes de Xinjiang a unirse a ellos, separar a Xinjiang de China y poner en peligro la seguridad social", señala hoy en su web la agencia China News.
De acuerdo con los datos de esta agencia, recogidos también por el rotativo 'Shanghai Daily', el aumento del número de jóvenes xinjianeses que participan en "crímenes" se ha convertido en un serio problema social: en 2005 el número de delitos cometidos por jóvenes representó el 33,7 por ciento del total, casi el doble del porcentaje registrado cinco años antes.
Según el departamento de seguridad pública regional, el 68,5 por ciento de los delitos estuvieron relacionados con violaciones a la propiedad, aunque la mitad de los casos en los que hubo jóvenes implicados tuvieron relación con bandas, en las que también participan estudiantes.
La información señala también que, según los expertos, el Gobierno debería crear "agencias específicas para resolver el problema y ayudar a los jóvenes xinjianeses". Entre las recomendaciones también se incluye aumentar los registros en lugares de ocio como discotecas, karaokes o salas de videojuegos.
El pasado 8 de enero el Gobierno chino informó de que había matado a 18 terroristas al intentar destruir una base del Movimiento Islámico del Turkestán Oriental, organización que Beijing asegura que está vinculada a Al Qaeda y que la ONU calificó como grupo terrorista en 2002.
Situada en el extremo occidental de China, Xinjiang es la principal fuente de petróleo y gas natural de China, que se anexionó la región a finales del siglo XIX; la población oriunda de esta región está compuesta por uigures, kazajos y uzbecos, aunque Beijing inició hace décadas una política de "repoblación" con habitantes 'han' (la población mayoritaria china) similar a la realizada en Tíbet para controlar los levantamientos, y es a ellos a quienes coloca en los puestos de mando de estas regiones.
