MADRID, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
Estados Unidos, la OTAN y la Organización para la Cooperación Islámica han realizado un llamamiento a los talibán y al Gobierno afgano para que acerquen posturas con urgencia mientras el proceso de paz en el país atraviesa un momento especialmente difícil por el repunte de ataques insurgentes en el país y la crisis política que atraviesa el Ejecutivo de Kabul, por no mencionar el impacto del coronavirus.
La OTAN ha reclamado este viernes que arranquen las negociaciones de paz en Afganistán entre el Gobierno de Kabul y los talibán a fin de que se pueda aprovechar el impulso generado por el acuerdo alcanzado por Estados Unidos y los insurgentes a finales de febrero en Doha.
En un comunicado emitido este viernes, la Alianza recalca que las negociaciones de paz suponen una oportunidad histórica para poner fin a décadas de conflicto en el país centroasiático, por lo que pide a todas las partes que actúen "con urgencia" para cumplir sus compromisos de reducir la violencia y de avanzar hacia el proceso político. "Es la hora de actuar para alcanzar una paz sostenible", ha subrayado.
En este sentido, el representante especial de Estados Unidos para la reconciliación de Afganistán, Zalmay Khalilzad, ha dado la bienvenida a la declaración de la OTAN, por la que insta a los talibán a reducir la violencia, pide al Gobierno afgano que ponga fin a la crisis política y llama a la aceleración del intercambio de prisioneros.
"Con qué urgencia y con qué convicción responden las partes a estos pasos determinará si Afganistán avanza o sigue sumido en la guerra, la pobreza y las enfermedades", ha declarado el enviado de Estados Unidos en comentarios recogidos por Tolo News.
"El acuerdo entre los Estados Unidos y los talibán brinda una oportunidad histórica para Afganistán y nuestros aliados, de hecho la comunidad internacional, exhortan a los líderes afganos a que pongan a su país y a su pueblo por encima de todo", ha añadido.
La Organización de Cooperación Islámica también ha querido dejar claro su llamamiento a "todos los líderes y partidos afganos para que reduzcan urgentemente la violencia y trabajen por un alto el fuego duradero".
Las cifras mostradas al medio afgano por responsables de seguridad y fuentes del Gobierno revelan que 98 miembros de las fuerzas de seguridad afganas perdieron la vida en ataques talibán en 14 provincias del 18 al 24 de abril. Al menos otras 70 personas han resultado heridas y más de 10 miembros de la fuerza de seguridad están desaparecidos, según las fuentes.
Los analistas dicen que el aumento de la violencia es el resultado de la incertidumbre y los retrasos en el proceso de paz, así como la llegada de la temporada de combate en primavera.
CASI 1.500 CONTAGIOS
El Ministerio de Salud Pública afgano ha anunciado este sábado que los casos confirmados de coronavirus han alcanzado los 1.463 en el país, donde han muerto 47 personas tras cuatro nuevos fallecimientos en las últimas horas.
De los 133 casos nuevos, 25 fueron identificados en Herat, 21 en Balj, 20 en Kandahar, y 16 en la capital, Kabul.
Como nota positiva, el portavoz del Ministerio, Wahidulá Mayar, ha confirmado que el país "ha resuelto" su escasez de pruebas de RNA para la verificación de los tests de coronavirus. Al país llegarán 10.000 de estas pruebas en los próximos días y 50.000 en las próximas semanas.
