ZAGREB, 28 Feb. (EP/AP) -
El Gobierno de Croacia podría retirar la denuncia por genocidio que presentó contra Serbia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) después de la reciente decisión de este organismo, la máxima instancia judicial de la ONU, de absolver a Belgrado de cualquier responsabilidad directa en actos de genocidio en Bosnia-Herzegovina.
Croacia también presentó, al igual que Bosnia, una demanda contra Serbia --en tanto que sucesor a efectos legales de la desaparecida Yugoslavia-- por actos de genocidio cometidos durante la guerra de 1991, con el argumento de que Belgrado apoyaba a los serbo-croatas que luchaban contra el Gobierno de la entonces recién independizada Croacia.
Un representante legal croata ante la CIJ, Ivan Simonovic, declaró a Associated Press que Croacia debería "intentar conseguir por otra vía lo que se pretende con el pleito, mediante un acuerdo amistoso". En caso de no prosperar, añadió, se podría insistir con la demanda.
Las declaraciones de Simonovic revelan la falta de confianza de Zagreb hacia la CIJ. El pasado lunes, la Corte absolvió a Serbia de cualquier responsabilidad directa en actos de genocidio en Bosnia-Herzegovina durante la guerra de 1992-1995. Más concretamente, la CIJ estableció que no hay pruebas de que se cometiera genocidio en Bosnia-Herzegovina, salvo en el enclave de Srebrenica, y que en este caso no está demostrada la participación directa de la desaparecida República Federativa de Yugoslavia (RFY).
Tras esta decisión, el Gobierno croata informó de que había empezado a estudiar sus posibles efectos en su caso. El presidente de Croacia, Stipe Mesic, incluso declaró que este fallo revela que "hay pocas posibilidades" de que Serbia sea acusada de genocidio en Croacia y que "quizá se podría hacer justicia mediante negociaciones directas" con Serbia. Por su parte, el presidente del Parlamento, Vladimir Seks, declaró que es "obvio" que en estas circunstancias Zagreb perdería su caso en la CIJ.
