LONDRES, 3 Oct. (Reuters/EP) -
Un grupo de activistas contra el cambio climático ha utilizado un camión de bomberos para esparcir pintura roja en la fachada del Ministerio de Finanzas británico este jueves para llamar la atención sobre lo que ellos consideran una falta por parte del Gobierno al no advertir sobre el avance de este fenómeno.
Los activistas han conducido el vehículo de extinción de incendios, cargado con pintura roja para simular sangre, hasta la puerta del Ministerio y han usado la bomba de agua para pintar el edificio, aunque en algún momento han perdido el control de la manguera.
La agrupación Extinction Rebellion ha reivindicado que sus activistas han rociado el Tesoro con 1.800 litros de sangre falsa y el eslogan "parad de financiar la muerte del clima", que se puede leer en el camión de bomberos, en las paredes del edificio y en numerosas pancartas.
"El Tesoro ha estado frustrando los esfuerzos de otros departamentos del Gobierno de emprender acciones contra el cambio climático porque solo le preocupa el crecimiento económico", ha criticado uno de los activistas llamado Ben. "No se da cuenta de que el crecimiento económico eterno llevaría a la muerte climática", ha lamentado.
El color rojo con el que han cubierto el Ministerio es una representación de los que ya han muerto y también de "las personas que van a empezar a morir por el cambio climático en todo el mundo" a no ser que se tomen medidas inmediatas, ha explicado el activista.
La Policía ha informado de que hay cuatro sospechosos detenidos por los daños causados y por cortar las calles. El camión de bomberos había sido adquirido por ebay, y los policías desconcertados no han decidido qué hacer con él.
El grupo de activistas llama a la desobediencia civil no violenta para obligar a los gobiernos a reducir las emisiones de dióxido de carbono y advertir sobre la crisis climática, que según la organización traerá hambre y caos social. Extinction Rebellion fue el ente tras las protestas en abril que ocuparon las calles de Londres durante 11 días, en el mayor acto de desobediencia civil en Reino Unido en la historia reciente.
El Tesoro británico se encuentra en un edificio que data de la época de Guillermo el Conquistador, entre el Palacio de Buckingham y el Parlamento.
