MADRID, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los Hermanos Musulmanes, la organización musulmana más importante del mundo, aseguran que las "extraordinarias protestas" registradas este viernes en varios puntos de Egipto "han tenido carácter espontáneo" y tienen por doble objetivo la dimisión del presidente Hosni Mubarak y evitar que su hijo Gamal acabe impuesto como su sucesor directo.
"Estas protestas no han sido iniciadas por ningún poder político, sino desde las bases. Ha sido la juventud, sobre todo, quien ha dado el paso adelante", declaró un portavoz de la organización a la cadena panárabe Al Yazira.
A juicio del portavoz, los manifestantes han denunciado, con su salida a las calles, "las injustas políticas de este régimen (de Mubarak) que lleva más de un cuarto de siglo en el país".
La organización, considerada proscrita por las autoridades egipcias, respalda las "demandas directas y simples" realizadas por la población, comenzando por las dos principales: la dimisión de Hosni Mubarak y el fin del procedimiento de sucesión.
"Gamal Mubarak no debe ni presentarse siquiera a las elecciones para suceder a su padre", aseguró el portavoz, quien recordó que otra de las exigencias populares pasa por la disolución del Parlamento egipcio y la convocatoria de nuevos comicios.
