BAGDAD 13 Mar. (Reuters/EP) -
La ofensiva del Ejército iraquí para recuperar el control de Tikrit, en manos del grupo terrorista Estado Islámico, parece haberse estancado tan solo dos días después de que las fuerzas de seguridad iraquíes y milicias chiíes consiguieran tomar parte de la ciudad.
Según una fuente del Mando de Operaciones Saladino, las fuerzas iraquíes no podrán seguir avanzando hasta que no lleguen refuerzos, mientras que Estado Islámico mantiene el control de alrededor de la mitad de la ciudad.
Con el uso de tácticas de guerra de guerrillas, los milicianos han convertido la ciudad en un laberinto de bombas de fabricación casera y edificios trampa con explosivos escondidos. Además, están utilizando francotiradores para frenar el avance del Ejército iraquí.
Hadi Al Amiri, el jefe de la Organización Paramilitar Badr chií y ahora uno de los hombres más poderosos de Irak, ha asegurado que el resultado de la batalla por Tikrit no se puede poner en duda, pero también ha confirmado que las fuerzas iraquíes necesitan más tiempo.
"No estamos en apuros, tenemos un plan y lo estamos siguiendo", ha explicado Amiri a la televisión estatal iraquí desde el campo de batalla en Tikrit. "Incluso si la batalla se prolonga durante dos, tres o cuatro días, todo seguirá bien. Vamos a celebrar la liberación de Tikrit del enemigo", ha sentenciado.
Más de 20.000 soldados iraquíes y de las milicias chiíes, apoyados por tribus suníes locales, lideran la ofensiva que comenzó hace 11 días y que ha conseguido avanzar desde el este y a lo largo de las orillas del Tigris.
La victoria sobre Tikrit supondría un impulso importante para el Ejército iraquí para afrontar la siguiente etapa de la campaña que pasa por recuperar el control de Mosul, la ciudad más grande que en la actualidad está bajo el mandato de Estado Islámico.
MARCHA A MOSUL
Los milicianos yihadistas invadieron Tikrit en junio de 2014. Desde entonces, han utilizado una serie de palacios construidos por el expresidente Sadam Husein como cuartel general. A día de hoy, Estado Islámico sigue controlando dicho complejo presidencial y al menos otros tres distritos del centro de Tikrit.
Las fuerzas especiales iraquíes han atacado al amanecer una escuela de medicina en el sur de la ciudad, pero los milicianos han logrado rechazar el ataque y han acabado con la vida de tres soldados. Otras seis personas han muerto cuando un vehículo lleno de explosivos se estrelló contra un puesto de las fuerzas iraquíes en el oeste de Tikrit.
La toma de Mosul puede resultar una tarea mucho más complicada para el Ejército. La ciudad es más grande, se encuentra más alejada del territorio controlado por el Gobierno central y está densamente poblada. A diferencia de Tikrit, cuya población huyó mayoritariamente antes del inicio de la operación militar, los habitantes de Mosul siguen en sus hogares.