MADRID, 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha advertido este jueves de que cualquiera que rompa el proceso de paz con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) "pagará el precio de sus acciones".
"Estamos decididos a avanzar en el proceso de paz. Nunca seremos la parte que lo rompa", ha sostenido durante su viaje de vuelta tras su visita diplomática a Kosovo, según ha informado el diario turco 'Hurriyet'.
Las declaraciones de Erdogan han llegado apenas dos días después de que el PKK señalara que sus milicianos están dispuestos a volver a las armas y a entrar de nuevo en Turquía desde sus bases en el norte de Irak en caso de que el Gobierno de Ankara no revitalice "en los próximos días" el proceso de paz.
En declaraciones a la agencia británica de noticias Reuters, Cemil Bayik, el dirigente más importante del PKK en libertad y miembro fundador del partido, acusó a Turquía de estar haciendo la guerra a los kurdos de Siria con su apoyo a los "bandidos" islamistas del norte del país árabe y advirtió de que "el pueblo kurdo tiene derecho a responder con la guerra".
"El proceso ha llegado a su fin", declaró Bayik en la entrevista, que tuvo lugar el pasado sábado en un reducto del PKK en el Monte Qandil, en el norte de Irak. "O aceptan unas negociaciones profundas y significativas con el movimiento kurdo o va a haber una guerra civil en Turquía", recalcó.
El PKK ha reclamado como condiciones previas la mejora de las condiciones de vida carcelaria del líder del movimiento, Abdulá Ocalan, con quien se debe negociar y tratar "en igualdad de condiciones", así como una serie de enmiendas en la Constitución y la designación de una tercera parte que ejerza de observadora del proceso.
"Estamos dispuestos por nosotros mismos a enviar de regreso al Norte de Kurdistán (nombre con que el PKK conoce a las regiones mayoritariamente kurdas del sureste de Turquía) a los grupos que se habían retirado si el Gobierno no acepta nuestras condiciones", ha declarado Bayik. La dirección que vaya a tomar el proceso debe aclararse "en los próximos días", agregó.
A juicio de Bayik, el paquete de reformas propuesto este mismo mes por el Gobierno turco es "vacío" y "no tiene nada que ver con la democracia". "No ha habido ningún cambio de mentalidad", denunció.
REFORMAS INSUFICIENTES
Las reformas propuestas, que según el Gobierno forman parte de un proceso más amplio "democratización" y no se limitan a resolver el conflicto kurdo, incluyen un cambio de las actuales normas electorales que han dejado en el pasado a los representantes kurdos fuera del Parlamento y la autorización de la financiación privada de la educación en lengua kurda.
Estas reformas, según el dirigente del PKK, no ofrecen garantías constitucionales sobre la identidad y la cultura kurdas, la ampliación de la autonomía de los kurdos o la educación en su propia lengua y no modifican las actuales leyes antiterroristas que han llevado a miles de sus militantes a la cárcel. "Hemos silenciado las armas para que hablen los políticos, pero nos encontramos con que los políticos están en prisión", dijo.
SIRIA
Según Bayik, Turquía ha aprovechado el alto el fuego con el PKK para trasladar su frente de guerra contra los kurdos a Siria, donde Ankara, con el apoyo del influyente clérigo turco Fethullah Gulen, está reclutando y entrenando a islamistas para su incorporación a los "grupos de bandidos" que combaten a los kurdos sirios.
"Ahora que el Gobierno turco está ayudando a los grupos de bandidos y llevando la guerra contra el pueblo del Oeste de Kurdistán (la región kurda del norte de Siria), el pueblo kurdo tiene derecho a hacer la guerra a Turquía", manifestó.