MADRID, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Alta Comisionada adjunta para los Derechos Humanos de la ONU, Kate Gilmore, ha declarado que la recuperación de Irak pasa por un planteamiento a largo plazo. "Irak tiene una amplia memoria pero una visión reducida" ha comentado Gilmore tras una visita de una semana de duración en la que pasó por Bagdad, Najaf, Erbil y el campo de desplazados internos de Duhok.
En su visita, Gilmore se reunió con el ministro de Asuntos Exteriores así como con otros altos cargos del Gobierno. Además, también coincidió con el presidente de la región del Kurdistán iraquí y líderes de la sociedad civil, entre los que se incluyen representantes religiosos y étnicos y defensores de los Derechos Humanos.
Gilmore ha destacado que todos los líderes de Irak, sin importar el cargo, deben comprometerse con la paz, la igualdad y el Estado de Derecho y ha criticado la falta de una narrativa política común que ayude a congregar las diversas comunidades. También ha recalcado que los grandes retos de Irak no son solo militares sino también políticos. "La existencia de conflictos armados en algunas zonas del país, no sirve como excusa ni justifica la ausencia del Estado de Derecho", ha apuntado Gilmore.
Por otro lado, el grupo terrorista Estado Islámico está cometiendo continuos abusos sobre la población del campo de desplazados internos de Duhok, tal y como han recalcado algunas víctimas, como un hombre que declara que el EI le obligó a cometer ejecuciones y a observar como lapidaban a una mujer embarazada. Una mujer del campo de desplazados también indicó que la habían estado explotando sexualmente durante un año. "Los atentados contra los Derechos Humanos que está llevando a cabo el EI no pueden ser olvidados ni silenciados", declaró Gilmore.
La Alta Comisionada adjunta para los Derechos Humanos de la ONU también ha urgido a la comunidad internacional a que haga algo para apoyar las necesidades humanitarias del país, ya que ha recordado que todos tienen responsabilidades con la población iraquí.
