MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
La organización terrorista Estado Islámico ha ejecutado a más de 2.100 personas desde que proclamó su 'califato' en Siria en junio del año pasado, según un balance del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, que analiza las consecuencias del conflicto.
En concreto, esta organización opositora ha podido confirmar la muerte de 2.154 personas a manos de Estado Islámico, 123 de ellas en el último mes. El Observatorio teme que la cifra sea mucho mayor ya que hay cientos de personas desaparecidas y detenidos de los que no se tiene ninguna información.
El balance incluye entre las 2.154 víctimas a 1.362 civiles, de los cuales nueve eran niños y 19 mujeres. La mayoría de estos fallecidos (930) pertenecían a la tribu Al Shaitaat, afincada en la zona rural de Deir al Zor.
Por otra parte, 137 personas ejecutadas formaban parte de facciones islamistas rivales a Estado Islámico como el Frente al Nusra, vinculado al Qaeda, mientras que 529 pertenecían a las fuerzas del régimen de Bashar al Assad.
Además, Estado Islámico también ha ejecutado a 126 de sus combatientes por "exceder los límites de la religión y espiar para países extranjeros", según un comunicado del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
El balance tiene en cuenta las muertes cometidas por Estado Islámico en situaciones ajenas al combate y recoge casos de decapitación, lapidación o fusilamiento, entre otras formas de ejecución. No están incluidos, sin embargo, los mediáticos asesinatos de periodistas y cooperantes extranjeros.
El grupo terrorista suní castiga con dureza cualquier atisbo de disidencia, pero también conductas sociales que consideran contrarias a su estricta visión de la 'sharia' o ley islámica. Así, en los últimos diez meses ha matado a personas condenadas por blasfemia y sodomía, entre otros 'delitos sociales'.
