WASHINGTON, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Estados Unidos ha condenado los ataques aéreos perpetrados contra objetivos civiles en el norte de Siria, entre ellos un hospital apoyado por la organización Médicos Sin Fronteras (MSF), y ha culpado al régimen de Bashar al Assad y a sus aliados.
El portavoz del Departamento de Estado norteamericano, John Kirby, ha advertido en un comunicado de que estos ataques contradicen los llamamientos "unánimes" lanzados durante la reunión del grupo de apoyo a Siria en Múnich, toda vez que se instó a "evitar los ataques contra civiles".
Asimismo, según Kirby, "arroja dudas sobre la voluntad y/o capacidad de Rusia para contribuir a parar la brutalidad continua del régimen de Al Assad contra su propio pueblo".
"Llamamos a todas las partes a cesar los ataques contra civiles y a dar pasos inmediatos para garantizar el acceso humanitario y el fin de las hostilidades que necesitan desesperadamente los sirios", ha reclamado el portavoz estadounidense.
Frente a las críticas de Washington, el embajador sirio en Moscú, Riad Haddad, ha atribuido a las fuerzas militares de Estados Unidos el ataque aéreo que ha destruido un hospital de la provincia de Idlib con el que colaboraba MSF.
"Fue destruido por la Fuerza Aérea de Estados Unidos. La Fuerza Aérea rusa no tiene nada que ver", ha alegado Haddad en una entrevista con la cadena de televisión Rossiya 24 recogida también por la agencia de noticias Reuters.