MADRID 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
El exprimer ministro maliense Cheick Modibo Diarrá, que se vio obligado a dimitir en la madrugada del martes su dimisión después de ser detenido en Bamako por orden del líder del golpe de Estado del 22 de marzo, el capitán Amadou Sanogo, ha traspasado sus poderes a su sucesor, Diango Cissoko, en una ceremonia celebrada este jueves en Bamako.
Diarrá ha comparecido públicamente por primer vez desde su arresto y se ha disculpado por todo desacuerdo que sus acciones al frente del Gobierno hayan podido causar. "Solo Dios no se equivoca, y yo no soy Dios, yo me equivoco", ha subrayado, según ha informado la cadena británica BBC.
Por su parte, Cissoko ha declarado que las prioridades del país no han cambiado, y ha destacado entre ellas la reconquista del norte del país y la organización de elecciones creíbles. Asimismo, ha recalcado que su Gobierno abrirá sus actividades la semana que viene.
El presidente interino del país, Diouncounda Traoré, designó pocas horas después de la dimisión de Diarrá a Cissoko para el cargo. Cissoko fue secretario general de la Presidencia maliense bajo el régimen de Musa Traoré, que fue derrocado en 1991 tras 22 años en el poder. Asimismo, ocupó ese mismo cargo entre 2008 y 2011 bajo la presidencia de Amadou Toumani Touré, quien fue sacado del poder por Sanogo este mismo año.
Sanogo, que sigue jugando un importante papel político en el país, encabezó en marzo un golpe de Estado contra el entonces presidente Amadou Toumani Touré por lo que consideró una mala gestión de la crisis política desatada en el norte del país tras la ofensiva del Movimiento Nacional de Liberación del Azawad (MNLA), un grupo tuareg laico que reclama la independencia de las tres provincias septentrionales del país.
En abril, el MNLA arrebató todo el norte de Malí de mayoría tuareg a las tropas gubernamentales en una rebelión cuyo fin último era la independencia, pero la revuelta fue enseguida secuestrada por tres grupos islamistas: el Movimiento de Unidad para la Yihad en África Occidental (MUYAO), Ansar Dine y Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI).
Desde entonces, los islamistas han implantado la 'sharia' en las ciudades de Tombuctú, Kidal y Gao y han destruido templos históricos en los que, según su criterio, se ejercía la idolatría.
A pesar de la declaración de independencia del MNLA, ni Malí ni la comunidad internacional reconocieron el paso dado por el grupo tuareg. Los tuareg han protagonizado varios levantamientos para conseguir que se reconozca la autonomía de dicho pueblo o la creación de un país propio en la región.
Ahora los países de la región ultiman una intervención militar para ayudar al Ejército maliense y restablecer el orden en la zona y el MNLA se ha alineado contra los islamistas para obtener rentas de esta misión. En este contexto, a mediados de noviembre se produjeron los primeros combates entre el MNLA y el MUYAO desde que en junio estos últimos expulsaran a los tuaregs de la ciudad de Gao.
Fuentes gubernamentales malienses indicaron la semana pasada que se ha nombrado a cuatro representantes para iniciar las discusiones con el MNLA y con los miembros moderados de Ansar Dine, algunos de los cuales han abogado por alcanzar un acuerdo con Bamako, desmarcándose de la línea adoptada por AQMI y el MUYAO.