El primer ministro francés pide en un mitin lograr la mayoría en la Asamblea Nacional para servir a Francia con Nicolas Sarkozy
PARÍS, 29 May. (del corresponsal de EUROPA PRESS, Salvador Martínez) -
El jefe de Estado galo, Nicolas Sarkozy, pidió esta tarde a los franceses que su voto en las próximas elecciones legislativas --que se celebrarán el 10 y 17 de junio-- le permita disponer de la mayoría en la Asamblea Nacional para "gobernar y mantener los compromisos" realizados durante la campaña presidencial.
"Francesas, franceses, os pido darme la mayoría que necesito para gobernar y mantener los compromisos que os he hecho", proclamó Sarkozy en los momentos finales de su intervención de esta tarde en el "encuentro republicano" que protagonizó en la ciudad de El Havre, en el noroeste del país.
"Os pido dar una mayoría a Francia para que ésta pueda avanzar", dijo Sarkozy, en un escenario en el que no había signos del partido que le aupó a la Presidencia de la República francesa, la Unión por un Movimiento Popular (UMP), y en el que sólo se podía leer una pancarta con el lema: "Juntos por una mayoría presidencial".
Antes de pedir el voto a su favor, Sarkozy planteó los dos escenarios en las próximas elecciones legislativas. "Habéis elegido a vuestro presidente, ahora tenéis que designar una nueva Asamblea Nacional, y una de dos, o bien resulta electa una mayoría presidencial que ha elegido apoyarme y el proyecto político que habéis aprobado en la elección presidencial se pone en marcha o bien la mayoría que se instala es la que se opone a ese proyecto y comienza una cohabitación con su cortejo de conflictos y parálisis".
Precisamente para poder poner en marcha su programa presidencial Sarkozy expuso en su alocución las medidas mas importantes de su programa. "Lo que he dicho lo haré porque os lo debo y porque se lo debo a Francia", aseguró.
En este sentido, Sarkozy manifestó su voluntad de ir "lo más lejos posible en la reforma" a través de "la rehabilitación del valor trabajo, la recompensa al mérito, la lucha contra el fraude, el endurecimiento de las penas contra los reincidentes, el pleno empleo, el aumento del nivel adquisitivo, la moralización del capitalismo financiero" y "la síntesis de la Francia del sí y del no" al Tratado Constitucional Europeo.
A quienes se oponen a un programa político que Sarkozy llegó a calificar hoy de "proyecto de civilización", el jefe de Estado galo les acusó de pertenecer al "pensamiento único" y les señaló que, "en las circunstancias actuales, frente a una expectativa tan grande" como la expresada en la elección presidencial mantener "los compromisos es una exigencia moral".
Por esta razón, Sarkozy mantuvo que no se "dejaré persuadir por los conservadurismos, los corporativismos y los feudalismos de todo tipo que después de tanto tiempo paralizan (todavía) la acción del Estado" francés.
Junto a las ideas de no fallar respecto de las expectativas, ni la promesa de la plena aplicación de su programa presidencial, Sarkozy dedicó buena parte de su discurso a explicar los motivos de su elección de un Gobierno paritario entre mujeres y hombres liderado por el primer ministro, François Fillon.
"En la aplicación de este proyecto hay sitio para todos las mujeres y los hombres de buena voluntad que aman a su país sin que renieguen de su historia ni de sus convicciones", añadió Sarkozy quien también habló de la "apertura" de su Gobierno, es decir, de la presencia de antiguos cuadros del Partido Socialista francés en su ejecutivo y de un centrista, el ministro de Defensa, Hervé Morin.
Sobre François Fillon, Sarkozy dijo "tener confianza en él" porque el jefe de Estado galo aseguró "haber elaborado" con él su proyecto presidencial. "Conozco su determinación para poner en marcha un proyecto que él conoce mejor que nadie", proclamó.
FILLON TAMBIÉN PIDE EL VOTO
Precisamente el primer ministro Fillon también entró en campaña al protagonizar hoy un mitin en la ciudad de Niza, donde "como en todo del departamento" de Alpes-Maritimes "se ha votado masivamente por Nicolas Sarkozy, 41 por ciento en la primera vuelta de la elección presidencial y 65 por ciento en la segunda", recordó el jefe de Gobierno francés.
Como hizo el presidente en los últimos compases de su alocución, Fillon pidió una "mayoría" en la Asamblea Nacional "para servir a Francia con Nicolas Sarkozy" y para "construir el futuro en lugar de sufrirlo". Con anterioridad, Fillon apeló a la "mayoría silenciosa" que encuentra en Nicolas Sarkozy su portavoz, con su mensaje de "ruptura y de esperanza", según los términos del primer ministro.
"Esta mayoría transciende todas las barreras políticas y todas las divisiones sociales. Del obrero al jefe de empresa, del profesor al agricultor, del jubilado al joven aprendiz, una ola se ha levantado" exigiendo "el cambio", proclamó.
Tras haber elegido los votantes de las presidenciales "la verdad", en palabras de Fillon, la mayoría exige un "choque político inmediato" con Sarkozy en la Presidencia de la República. Por esa razón, "actuamos juntos con la única voluntad de transformar nuestro país", dijo.
De ahí que recordara que el Ejecutivo galo quiere, desde este verano, permitir la deducción de los préstamos inmobiliarios, suprimir todos los impuestos sobre las sucesiones y situar en el 50 por ciento el porcentaje que el Estado retendrá del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
