MADRID, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Líbano, Saad Hariri, ha recordado este jueves la figura de su padre, el ex primer ministro Rafik Hariri, en un acto por el 14 aniversario de su asesinato, al tiempo que ha recalcado que "no cayó mártir para que el país fuera destruido".
En su discurso, Hariri ha resaltado que "el martirio de Rafik Hariri unió a los libaneses" y ha recalcado que el próximo veredicto del Tribunal Especial para Líbano (TEL) en torno al caso no debe convertirse "en una herramienta para azuzar la discordia" en el país.
Los acusados son varios miembros del partido-milicia chií Hezbolá, sospechosos de estar detrás del atentado con coche bomba perpetrado en la capital, Beirut, que se saldó con la muerte de Hariri y otras 22 personas.
El asesinato del primer ministro desencadenó en Líbano una serie de crisis políticas, asesinatos y atentados con bomba que derivaron en enfrentamientos entre miembros de distintas comunidades en mayo de 2008 que llevaron al país al borde de la guerra civil.
"El sueño de Rafik Hariri está con nosotros tras todos estos años y su proyecto de reconstrucción, desarrollo y estabilidad sigue siendo mencionado por todos los libaneses que quieren ver el país lleno de trabajo", ha manifestado el primer ministro libanés.
Así, ha manifestado que "se puede decir que 2019 será el año de la justicia que se ha estado esperando", si bien ha reiterado que "no ve ni acepta el veredicto como una forma de conseguir venganza", según ha informado el portal local de noticias Naharnet.
"El veredicto es el camino hacia la justicia y la negativa de encubrir la verdad, sin importar lo duro que sea", ha indicado, antes de lamentar que el país "haya pagado el precio" de la crisis política en el país tras el atentado de 2005.
Hariri ha destacado que el país "está hoy en un cruce de caminos" y ha argumentado que "no es momento de mostrar la fortaleza de cada uno o ajustar cuentas". "La gente está cansada de escuchar palabras repetidas", ha dicho.
Asimismo, ha defendido el "programa claro" que tiene el nuevo Gobierno y ha explicado que "tiene una financiación clara y mecanismos fundamentados en la transparencia y la reforma". "Tengan por seguro que el trabajo del programa no tiene identidad sectaria o regional", ha agregado.
Por otra parte, ha destacado su papel como protector del Acuerdo de Taif, firmado en 1989 para poner fin a la Guerra Civil en Líbano. "No abandonaremos Taif ni aceptaremos una violación de Taif", ha apostillado.
Hariri ha tenido además palabras para la crisis de los refugiados sirios y ha desfendido que "lo mejor que se puede hacer es trabajar para su regreso a su país, de forma voluntaria".
"Recalco la palabra voluntaria", ha dicho, antes de acusar al Gobierno de Siria de "querer vengarse de los desplazados" e "imponerles condiciones para su regreso". "No podemos aceptar de ninguna manera que nuestro país sea convertido en una herramienta para que los desplazados se conviertan en rehenes del régimen", ha zanjado.