MADRID, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las fuerzas de seguridad de Mozambique están intimidando, deteniendo y procesando a los periodistas que están cubriendo la lucha contra un grupo islamista que opera en la provincia de Cabo Delgado, en el norte del país, y que en los últimos meses han dejado decenas de muertos en sus ataques, según ha denunciado Human Rights Watch (HRW).
Según la ONG, desde el pasado junio el Gobierno ha impedido a varios medios y corresponsales visitar la provincia mientras el Ejército ha procedido a detener a aquellos que consiguieron llegar allí o la Policía les ha arrestado por cargos falsos.
"Las acciones del Gobierno mozambiqueño para silenciar a los medios en Cabo Delgado obstruyen el escrutinio público de las operaciones militares y sus presuntos abusos", ha lamentado el director para África del Sur de HRW, Dewa Mavhinga.
Según HRW, el periodista Amade Abubacar, que estaba entrevistando a desplazados por los insurgentes, permaneció detenido e incomunicado por el Ejército durante trece días el pasado enero y luego fue entregado para su procesamiento por la vía civil.
"El Gobierno debería liberar inmediatamente a Amade Abubacar y permitirles a él y a otros periodistas trabajar de forma libre y segura", ha reclamado el responsable de HRW. Abubacar, según la organización, fue golpeado mientras estuvo bajo custodia militar y actualmente se encuentra imputado por "violación de secretos del Estado" e "instigación pública al delito".
Los fiscales esgrimen que el cuaderno del periodista contenía información detallada sobre el grupo armado, incluidos nombres de insurgentes y que éste estaba cubriendo la situación sin informar a su editor en la radio comunitaria para la que trabajaba.
HRW ha documentado otros casos de detenciones arbitrarias de periodistas y otros abusos por parte de las fuerzas gubernmentales en localidades atacadas por el grupo islamista, al que popularmente se conoce como Al Shabaab, sin que por ahora esté claro si existe un vínculo con el grupo somalí del mismo nombre.
"La lucha de Mozambique contra los insurgentes no es ninguna excusa para limitar indebidamente la libertad de prensa", ha defendido Mavhinga. "Obstruyendo a los medios en Cabo Delgado, el Gobierno está intentando evitar que los mozambiqueños sepan lo que están haciendo ambas partes del conflicto", ha lamentado.