NUEVA DELHI 4 Jun. (EP/AP) -
La comunidad Gujjar, asentada en el noroeste de India, hizo hoy un llamamiento para abandonar la protesta, poniendo fin a una semana de disturbios que han dejado por lo menos 25 muertos. El llamamiento se dió después de que su líder alcanzara un acuerdo con políticos estatales que podría llevar a mayores beneficios gubernamentales para el grupo. El político de más alto nivel del estado de Rajasthan se comprometió a formar un panel para examinar las demandas de la comunidad de baja casta de Gujjar, para tener preferencia en trabajos gubernamentales y plazas en instituciones educativas y recomendar una solución dentro de los próximos tres meses.
"Tenemos lo que hemos pedido", dijo el líder gujjar, Kirori Singh Baisala, durante una conferencia conjunta con el ministro del estado, Vasundhara Raje. Aunque India prohibió oficialmente la discriminación entre castas hace décadas, grupos sociales bajos, como los gujjar, que tradicionalmente eran granjeros y pastores, todavía se enfrentan a amplias desventajas.
El acuerdo se produjo horas después de que cientos de manifestantes de Gujjar incendiaran autobuses y atacaran a policías con piedras en la capital de India para exigir mejores beneficios gubernamentales.
MANIFESTACIONES Y ENFRENTAMIENTOS
Líderes del grupo de Gujjar hicieron un llamamiento a la huelga general en Nueva Delhi para apoyar su campaña en el estado de Rajasthan al noroeste del país, donde los enfrentamientos entre la Policía y una casta rival han provocado al menos 25 muertos en los últimos días.
Varios grupos de manifestantes cargando palos interrumpieron el tráfico en diversos puntos de la capital, informó Rajan Bhagat, portavoz de la Policía de Nueva Delhi. Llevaban pancartas en las que se podía leer 'Detengan las atrocidades contra la comunidad Gujjar'.
La Policía usó gas lacrimógeno y bastones de bambú para dispersar a cerca de 500 manifestantes, que incendiaron dos autobuses y lanzaron piedras a los policías. También bloquearon carreteras de Nueva Delhi y quemaron efigies de Scindia.
El grupo de casta baja Meena, que ya recibe trato gubernamental especial, se opone a compartir los beneficios laborales y educativos con la comunidad de Gujjar. Enfrentamientos entre ambos bandos dejaron cuatro personas muertas el pasado viernes.
La mayor parte de la violencia ha tenido lugar en la ciudad de Dausa, en Rajasthan, incluyendo varios ataques a oficinas gubernamentales, estaciones de trenes y vehículos. Las manifestaciones también han interrumpido el transporte a Agra, donde se encuentra el Taj Mahal, desde la capital del estado, Jaipur.
En un intento por corregir errores del pasado, los Gobiernos federal y estatales han establecido cuotas para grupos de castas bajas para asegurar que obtengan puestos de trabajo gubernamentales y plazas en las universidades.
La comunidad Gujjar ya está clasificada como una de las miles de 'otras clases subdesarrolladas' de India, que les otorga un trato preferencial. Sin embargo, quiere ser redefinida con una clasificación aún menor que les abriría más oportunidades.