Actualizado: martes, 23 febrero 2016 12:19

JERSUSALÉN, 23 Feb. (Reuters/EP) -

El Ejército israelí ha derribado este martes las casas de dos palestinos acusados de matar a cinco personas en dos ataques en los asentamientos judíos de Cisjordania en 2014, según han informado fuentes militares.

Las excavadoras han derribado en el pueblo de Dir Samt la casa de Mohamed al Haroub, que el 20 de noviembre de 2014 disparó a un coche cerca de un bloque de asentamientos en Cisjordania y mató a un israelí, a un estudiante estadounidense y a un palestino.

En el pueblo de Dura se ha derribado la casa de Raed Masalmeh, que apuñaló y mató a dos israelíes en un edificio de oficinas en Tel Aviv, según ha informado el Ejército. Ambos hombres fueron detenidos tras los ataques.

Funcionarios israelíes han informado de que estas demoliciones podrían evitar que otros palestinos lanzasen nuevos ataques en la ola de apuñalamientos, disparos y embestidas con coches que han matado a 28 israelíes y ciudadanos estadounidenses desde octubre de 2015.

Palestinos y críticos internacionales califican la destrucción de los hogares familiares de castigo colectivo. Los residentes locales han informado de que las demoliciones han causado el desplazamiento de 12 familiares Al Haroub. De momento, no hay información sobre cuantas personas vivían en la casa de Masalmeh.

En los últimos cinco meses, las fuerzas de seguridad israelíes han matado a al menos 168 palestinos, 111 supuestos atacantes y el resto durante tiroteos en violentas protestas anti-isrealíes.

La violencia en la zona ha aumentado recientemente debido a varios factores, incluyendo una disputa por el complejo de la mezquita Al Aqsa de Jerusalén y el fracaso de varias rondas de conversaciones de paz para asegurar a los palestinos un estado independiente dentro del territorio ocupado.

Los líderes palestinos han asegurado que no hay ningún avance en el horizonte y que los jóvenes no ven ningún futuro por delante. Por su parte, Israel ha denunciado que los líderes palestinos y los grupos islamistas que llaman a la destrucción de Israel incitan a los jóvenes a la violencia.

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