BELGRADO, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro serbio, Vojislav Kostunica, rechazó anoche "el nuevo borrador de resolución del Consejo de Seguridad de la ONU presentado por Estados Unidos" ya que considera que éste también supone "una preparación para la independencia" de Kosovo.
"Kosovo no será independiente y las autoridades estadounidenses, que defienden diariamente la independencia de la provincia en sus declaraciones, no pueden cambiar este hecho", aseveró Kostunica en su declaración, que recoge la agencia serbia Beta.
En este sentido, consideró que sería muy importante para el futuro de las relaciones entre Serbia y Estados Unidos que Washington supiera que Belgrado nunca aceptará que se le quite una parte de su territorio.
"Si Serbia está diciendo claramente que su interés es la preservación de su integridad territorial, de acuerdo con la Carta de la ONU, entonces es elemental que todos los estados que desean tener relaciones normales con Serbia respeten esta petición natural", opinó el primer ministro serbio.
"Cualquier país que apoye los intentos de separar Kosovo de Serbia tendrá que admitir el deterioro de las relaciones mutuas", previno. Para Kostunica, es "especialmente inaceptable la explicación de que el intento de separar Kosovo está guiado en realidad por una verdadera amistad hacia Serbia".
"Esta explicación es un insulto al sentido común", subrayó, reiterando que "Kosovo seguirá siendo una parte integral e inalienable de Serbia, porque así está escrito en la Carta de la ONU y en la Constitución de Serbia".
El nuevo borrador, al que ha tenido acceso la agencia AP y que trata de conseguir el apoyo de Rusia, revisa el anterior de modo que no incluya la posibilidad de independencia de la provincia de Serbia en el caso de que ambas partes no lleguen a un acuerdo tras cuatro meses de negociaciones.
El texto anterior sí contemplaba que de no alcanzarse un acuerdo para definir el estatus de Kosovo, se autorizaría automáticamente el camino a la independencia de la provincia, a no ser que Naciones Unidas decidiera otra cosa.
El nuevo borrador --elaborado por la Unión Europea y Estados Unidos--, daría a las partes un plazo de 120 días para forjar un acuerdo entre albanos y serbios en Kosovo, pero no hace mención a la posibilidad de independencia, sino que afirma que el Consejo "revisará de nuevo la situación a la vista de las nuevas negociaciones". De este modo, el Consejo necesitaría otra resolución para decidir sobre cualquier acción futura relacionada con Kosovo.
