El líder del PLJ denuncia el "silencio de la élite política" ante "los ataques contra Hermanos Musulmanes"

Actualizado: lunes, 1 julio 2013 21:09

MADRID, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -

El líder del Partido Libertad y Justicia (PLJ) --vinculado a Hermanos Musulmanes--, Mohamed Beltagy, ha denunciado este lunes el "silencio de la élite política" ante "los ataques ejecutados contra Hermanos Musulmanes", al tiempo que ha acusado a la oposición de "apoyar tácitamente" los actos violentos que se han registrado en el país en los últimos días.

Beltagy, que es asimismo un alto cargo de la organización islamista, ha criticado duramente al Ministerio del Interior y a las fuerzas de seguridad del país por su "incapacidad" para defender las sedes de Hermanos Musulmanes.

"Tras el incendio de sedes de Hermanos Musulmanes en varias provincias, hoy ha tenido lugar un ataque por parte de matones contra la sede principal (de la formación), en el que se han utilizado todo tipo de bombas, cócteles molotov, fusiles y pistolas. Esto ha tenido lugar en medio del silencio total de las fuerzas políticas y las ONG", ha indicado a través de un comunicado.

"El problema no es apedrear edificios o los puntos emblemáticos de la oficina principal de Hermanos Musulmanes, se trata sobre todo de los fallecidos, los heridos. Esto ha tenido lugar en medio de vergonzantes llamamientos a la manifestación pacífica mientras la contrarrevolución jugaba un papel criminal", ha manifestado Beltagy.

Las declaraciones del alto cargo de Hermanos Musulmanes han llegado apenas horas después de que manifestantes opositores al presidente Mursi tomaran al asalto la sede central de la organización islamista a la que pertenece el mandatario. Los ocupantes del edificio defendieron durante la tarde y la noche del domingo la sede, pero finalmente la abandonaron tras violentos enfrentamientos.

Al menos siete personas han muerto en los enfrentamientos entre partidarios y detractores de Mursi durante las horas precedentes al asalto y fuentes médicas cifran en un más de un centenar los heridos.

Testigos presenciales han informado de que los atacantes han lanzado bombas incendiarias y piedras contra la sede del grupo islamista. Los guardias atrincherados en la sede abrieron fuego en respuesta.

Las críticas por parte de las fuerzas revolucionarias contra Hermanos Musulmanes --que no se unió en un principio a las manifestaciones-- han ido en aumento debido a lo que la oposición considera como una aquiescencia por parte de la formación islamista con los elementos del antiguo Gobierno.

Tras la llegada al poder del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas tras la salida del poder del expresidente Hosni Mubarak, Hermanos Musulmanes hizo un llamamiento al fin de las protestas y se posicionó cerca de las autoridades interinas --personificadas en el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas--, lo que fue considerado una "traición" a la revolución y sus objetivos.

Las tensiones han aumentado a raíz la victoria en las posteriores elecciones presidenciales de Mursi y de sus medidas, que las fuerzas revolucionarias consideran destinadas a beneficiar al grupo y a impedir un progreso real en las demandas mantenidas durante las protestas en el país.

Asimismo, la decisión del presidente de nombrar a 17 nuevos gobernadores, siete de los cuales pertenecen a Hermanos Musulmanes, ha desatado una nueva oleada de protestas. El grupo controla así diez de las 27 gobernaciones del país árabe. El resto de los gobernadores están vinculados a militares y policías.