Al menos 19 muertos en enfrentamientos entre soldados y rebeldes en la RDC

GOMA (REPÚBLICA DEMOCRÁTICA DEL CONGO), 6 (Reuters/EP)

Al menos 19 personas han muerto en enfrentamientos entre rebeldes y soldados congoleños en una base del Ejército en el este de República Democrática del Congo (RDC), según han informado el Gobierno y un líder insurgente.

El Gobierno ha afirmado que la base fue atacada por un grupo de combatientes Mai Mai, vinculados con antiguos rebeldes que formaban parte del Ejército y que desertaron en las últimas semanas para protestar por la decisión del Ejecutivo de detener a Bosco Ntaganda, un general renegado.

Se cree que a la rebelión se han sumado combatientes ruandeses, algo que ha complicado las relaciones entre Ruanda y la RDC. Además, los enfrentamientos de los últimos dos meses han obligado a más de 100.000 personas a abandonar sus casas.

Lambert Mende, portavoz del Gobierno, ha precisado que la base asaltada por los Mai Mai, leales al general Kakule Sikula Lafontaine, se encuentra en Lubero, en la provincia de Kivu Norte. "Atacaron nuestro cuartel y mataron a varios militares", ha señalado Mende, según el cual las víctimas mortales son once soldados y ocho rebeldes.

Lafontaine ha declarado por teléfono a la agencia Reuters que sus hombres perdieron a un combatiente pero mataron a 31 militares y cogieron munición y armas del Ejército, incluido un mortero.

El líder rebelde ha indicado que los soldados atacaron las posiciones de los insurgentes en Kasiki, en Kivu Norte. "Pero nosotros hicimos que retrocedieran hasta su base", ha añadido.

Lafontaine, que antes dirigía el grupo armado PARECO, creó este año un nuevo movimiento llamado UPCP junto al coronel Albert Kahasha, uno de los cientos de soldados que se amotinaron cuando el Gobierno congoleño dijo que iba a detener a Ntaganda, reclamado por el Tribunal Penal Internacional por crímenes de guerra.

En un discurso pronunciado el martes por la noche en la televisión pública, Mende afirmó que desde que comenzó la rebelión, a finales de marzo, 200 soldados leales a Ntaganda han muerto y más de 370 se han rendido, entre ellos 25 ruandeses.

Ruanda niega que, como han sugerido la ONU y la organización Human Rights Watch, algunos miembros de su Ejército hayan estado proporcionando armas y soldados a los amotinados, conocidos como M23.