MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
Al menos dos personas han perdido la vida, entre ellas un niño, y otras cinco han resultado heridas en una emboscada llevada a cabo por grupos terroristas con mortero en uno de los barrios residenciales de la ciudad siria de Deráa, de donde miles de civiles están huyendo con motivo de la ofensiva lanzada por el Ejército sirio, según ha informado este domingo la agencia de noticias SANA.
Según la agencia, además de perpetrar un ataque en Deráa contra un grupo de civiles que estaba evacuando la localidad, varios grupos armados atacaron las aldeas de Dama y Nijran, ubicadas en la provincia vecina de Suwaida, sin dejar víctimas mortales.
De acuerdo con dos centros de monitorización de actividad aérea en la zona consultados por la agencia de noticias Reuters, se han registrado al menos una veintena de ataques en Busra Al Harir, al noreste de la ciudad de Deráa.
Las fuerzas gubernamentales sirias han hecho un uso intensivo de la artillería y de los misiles en su ofensiva actual, por lo que la actuación de la aviación rusa resulta esencial para poder tomar el control de áreas bajo el control de los rebeldes en las que las tropas terrestres sirias no han podido desplegarse todavía.
El presidente sirio, Basha Al Assad, ha jurado recuperar el control de la zona, por lo que ordenó la ofensiva a pesar de que amenaza la 'zona segura' acordada por Estados Unidos y Rusia el año pasado.
Una importante ofensiva del Gobierno en el sudoeste podría impulsar una escalada en la guerra. Estados Unidos ya ha advertido de que podría tomar "medidas firmes y apropiadas" en respuesta a las violaciones del Gobierno de un acuerdo de reducción de los ataques alcanzado el año pasado con Rusia para contener el conflicto en el suroeste.
El conflicto ha avanzado hacia esta parte del país desde que Al Assad, con ayuda crítica de sus aliados respaldados por Rusia e Irán, terminó con los últimos reductos de territorio controlados por los rebeldes cerca de Damasco y la ciudad de Homs.