PRAGA, 15 Nov. (Reuters/EP) -
Miles de personas se han manifestado este jueves en la capital de República Checa, Praga, para reclamar la dimisión del primer ministro, Andrej Babis, en medio de las consultas en el seno de su coalición sobre la posibilidad de abandonar el Gobierno.
La presión sobre Babis ha aumentado a raíz de las informaciones recogidas por los medios locales en las que su hijo afirma que el primer ministro quiere que se esconda para evitar una investigación criminal contra él y sus hijos por corrupción.
El hijo de Babis ha dicho en declaraciones al portal Seznam.cz que le localizaron en Suiza que su padre quiso el año pasado que se escondiera, después de que fuera imputado en el caso.
Asimismo, ha afirmado que un hombre que le vigilaba le llevó a la península de Crimea y le retuvo contra su voluntad. Babis ha asegurado que su hijo viajó a Crimea de forma voluntaria y ha apuntado que recibe tratamiento por esquizofrenia desde 2015. La Policía ha descartado un crimen.
La oposición ha reaccionado pidiendo una moción de censura que, según el presidente del Parlamento, se celebrará probablemente el 23 de noviembre. Babis ha negado en todo momento haber incurrido en corrupción, en un caso vinculado con subsidios entregados por la Unión Europea (UE) hace una década.
Pese a ello, miles de personas se han concentrado en la plaza Wenceslao coreando 'Dimisión', 'Abajo con Babis' y 'Vergüenza'. Algunos de ellos han ondeado banderas checas y de la UE.
El Partido Social Demócrata (CSSD), de centro-izquierda, ha señalado que considera "todas las opciones" de ahora en adelante. "La situación es grave, la información es sustancial y tenemos que analizar la postura más responsable", ha dicho el líder de la formación, Jan Hamacek.
Sin embargo, el partido ultraderechista SPD, contrario a la UE y la OTAN, ha indicado que podría respaldar a Babis en caso de que el CSSD abandone la coalición, lo que le permitiría permanecer en el Gobierno.
