TIRANA, 13 Mar. (Reuters/EP) -
Miles de personas se han manifestado este jueves frente a la oficina del primer ministro, Edi Rama, para pedir la renuncia del presidente del Parlamento, Ilir Meta, en medio de las acusaciones en su contra sobre su presunta orden para asesinar a dos parlamentarios.
Meta, Rama y varios altos cargos del Gobierno han declarado ante los tribunales sobre el presunto complot, si bien por el momento no se han presentado cargos contra ninguno de ellos. El primer ministro ha descrito el caso como "una asquerosa telenovela".
La denuncia surgió tras un vídeo publicado por el parlamentario Tom Doshi, quien aseguró que se había concretado a un asesino a suelto para tirotearle a él y a otro parlamentario, agregando que informó a Rama del complot hace seis meses.
Los manifestantes se han concentrado frente a la oficina de Rama coreando cánticos y portando pancartas en las que se reclamaba la dimisión de Meta. Por el momento, la polémica no ha minado el respaldo al partido gubernamental, al que pertenecen todos los implicados.
