MADRID, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
Una persona ha muerto y más de 800 personas se han visto afectadas por una intoxicación alimentaria en un campamento para desplazados internos ubicado cerca de Mosul, en el norte de Irak, tras ingerir comida entregada por una ONG qatarí con motivo de la ruptura del ayuno por el Ramadán.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM), citada por la agencia de noticias Reuters, ha indicado que una mujer ha fallecido a causa de la ingesta de comida en mal estado.
Además, aunque en un principio, el director del Departamento de Salud de Erbil, el doctor Saman Barzinji, anunció la muerte de un niño, este martes ha aclarado que, si bien el menor "entró en 'shock' y estaba altamente deshidratado", ha sobrevivido.
Según las informaciones recogidas por la cadena de televisión kurda Rudaw, los afectados son residentes del campamento Hassansham U2 a los que se entregó comida de un restaurante de Erbil, capital de la región semiautónoma del Kurdistán iraquí.
De momento, hay alrededor de 800 afectados por la intoxicación alimentaria, de los cuales 300 están hospitalizados. Sin embargo, el supervisor del campamento por parte de la Fundación de Caridad Barzani, Rizgar Obed, ha alertado de que el balance podría ascender a 900.
La comisa entregada estaba compuesta por judías, arroz, pollo y una bebida de yogur. La mayoría de los afectados son niños y ancianos que presentan dolor de estómago y vómitos.
El alcalde de Erbil, Nabaz Abdulhamid, ha indicado que el propietario del restaurante ha sido arrestado tras el incidente. Las autoridades han enviado 40 ambulancias al lugar, situado 30 kilómetros al este de Mosul.
El campamento, abierto por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en mayo, tiene capacidad para cerca de 9.000 personas. "Es trágico que esto le haya ocurrido a gente que ha pasado por tanto", ha dicho a Reuters Andrej Mahecic, responsable de ACNUR en Hassansham U2.
