MADRID, 3 Jul. (EUROPA PRESS) -
Al menos dos civiles, entre ellos un niño, murieron en un atentado con coche bomba perpetrado en la noche del lunes en la localidad afgana de Pul-e-Alam, capital de la provincia de Logar (centro), según han confirmado este martes las autoridades.
Fuentes oficiales han indicado que el objetivo del atentado fue un convoy de las tropas internacionales y han agregado que otros tres civiles --todas mujeres-- resultaron heridas.
Los talibán han reclamado la autoría del ataque y han asegurado que cinco soldados extranjeros murieron en el mismo, tal y como ha recogido la cadena de televisión afgana Tolo TV.
Sin embargo, el portavoz de las fuerzas estadounidenses en Afganistán, Martin O'Donnell, ha desmentido este extremo y ha recalcado que el atentado se saldó sin bajas entre los militares.
"Hemos visto, aunque no podemos confirmar, informaciones de oficiales afganos sobre la muerte de civiles, entre ellos mujeres y niños", ha dicho.
"De ser cierto, nuestros pensamientos están con los familiares de los inocentes, que siguen sufriendo sin necesidad a causa de la violencia de los talibán y su negativa a escuchar el llamamiento del pueblo afgano para que den un paso valiente hacia una paz duradera", ha remachado.
Por otra parte, al menos siete presuntos talibán han muerto en bombardeos llevados a cabo por Estados Unidos en la provincia de Helmand (sur), según la oficina del gobierno provincial.
En su comunicado, recogido por la agencia afgana de noticias Jaama Press, las autoridades provinciales han detallado que los ataques aéreos han sido ejecutados en los distritos de Garamser y Naua.
Estos sucesos han llegado días después del fin de la tregua unilateral anunciada por el presidente del país, Ashraf Ghani. Los talibán han rechazado por el momento abrir conversaciones de paz con las autoridades.
