PORT HARCOURT (NIGERIA), 1 Ago. (EP/AP) -
Hombres armados han secuestrado a un trabajador de la empresa Elf, filial de la francesa Total en las inmediaciones de una iglesia situada en el la ciudad rica en petróleo de Port Harcourt, en el sur de Nigeria, según informó hoy un compañero.
Unos 150 extranjeros han sido secuestrados en el país africano este año. Las víctimas no suelen presentar heridas y su liberación se consigue tras el pago de un rescate.
Esta práctica comenzó cuando las comunidades más pobres empezaron a tomar rehenes porque aseguraban que los beneficios del petróleo no llegan al pueblo o por la contaminación. Sin embargo, grupos más organizados comenzaron a actuar gradualmente, demandando más derechos políticos para las regiones más pobres, y cometiendo ellos los ataques.
La Policía nigeriana afirma que los secuestros actuales están cometidos por grupos criminales que sólo están interesados en el dinero. Recientemente han comenzado a capturar a nigerianos ricos como objetivos.
