ISLAMABAD, 19 Jul. (Reuters/EP) -
El Gobierno de Pakistán ha delineado un plan para revisar el temario escolar en las escuelas religiosas para acercar a estas instituciones a los centros públicos y hacer frente a las ideologías extremistas.
El ministro de Educación, Shafqat Mahmud, ha señalado que el plan ha sido acordado con la Uafaq-ul-madaris --una organización paraguas de las madrasas del país-- y permitirá el registro de estas escuelas y fortalecer las clases de inglés, ciencia y matemáticas.
Las escuelas religiosas seguirán encargadas de las enseñanzas religiosas, si bien con el compromiso que las ideologías extremistas no serán incluidas en el temario. "No se abogará por el discurso del odio de ningún tipo contra ninguna religión o secta", ha dicho Mahmud.
El plan es el último esfuerzo de las autoridades para hacer frente a las preocupaciones en torno a la utilización de parte de las 30.000 'adrasas del país para difundir una enseñanza religiosas extremista que hunde sus raíces en el wahabismo saudí.
El primer ministro de Pakistán, Imran Jan, hace frente a presiones internacionales para que actúe contra los grupos armados que operan en el territorio del país, responsables de ataques en varios países de la región, entre ellos Afganistán, India e Irán.
Ante la posibilidad de que la medida provoque una reacción violenta en el país, profundamente conservador, Mahmud ha recalcado que el Gobierno no busca una confrontación con las madrasas, a menudo los únicos centros educativos disponibles para las familias pobres.
"No nos haremos con el control de las madrasas", ha resaltado. "No son medidas contra ellas. Estamos intentando esto como un medio facilitador", ha agregado. Las escuelas religiosas permanecerán fuera del control del Ejecutivo.
Pese a ello, las oficinas regionales del Ministerio de Educación supervisarán los registros y ayudarán con asuntos como una mejora de la calidad de las clases y la apertura de cuentas bancarias para que los centros recauden sus propios fondos.
El ministro ha explicado que los cambios serán introducido de forma gradual, con un primer grupo de 'madrasas' realizando exámenes el año que viene. "No tendrá lugar en un día", ha zanjado.
