BAGDAD 20 Jun. (Reuters/EP) -
El principal clérigo chií de Irak, el gran ayatolá Alí al Sistaní, ha instado este viernes al nuevo Parlamento del país a que comience a trabajar sin dilación para formar nuevo Gobierno y poner fin así a la división sectaria de la política iraquí que está alimentando el avance de los yihadistas suníes del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS).
"Es muy importante que se respeten los plazos constitucionales para elegir al presidente del Parlamento, al presidente del país y al primer ministro", ha declarado Alí Sistaní a través de un sermón enunciado por su representante Sayed Ahmed Al Saafi en la mezquita del Imán Husein de Kerbala.
Según la Carta Magna, la primera sesión del parlamento debería tener lugar en un plazo de 15 días tras la ratificación de los resultados, algo que se produjo este martes, pero los diversos bloques políticos todavía no se han puesto de acuerdo a la hora de celebrar las reuniones para elegir los cargos.
Al margen de la presencia del ISIS, existen serias dudas sobre la capacidad del primer ministro chií, Nuri Al Maliki. El presidente de EEUU, Barack Obama, dejó caer ayer jueves que prefiere un candidato de corte "unificador" y declinó refrendar a Al Maliki, casi sin apoyos entre chiíes y suníes.
Un asesor del líder suní Usama al Niyaifi se mostró tajante. "No vamos a permitir que Al Maliki siga un tercer mandato. Hay que sustituir a ese hombre si queremos que las cosas se calmen", ha hecho saber en declaraciones al diario estaounidense 'The New York Times'.
De la misma opinión es el líder del bloque chií Ahrar, Dhiaa al Asadi. Al Maliki "no tiene derecho a un tercer mandato. Estoy seguro de que podemos expulsarle a través de medios constitucionales", ha asegurado.
Los tres nombres que se barajan son chíies: Adel Abdul Mahdi, ex vicepresidente de Irak, de corte moderado; Ahmed Chalabi --una figura controvertida que apoyó sin remordimientos los despidos de miles de funcionarios suníes tras la caída del régimen de Sadam Husein-- y Bayan Jaber, ex ministro del Interior, presuntamente implicado en torturas a prisioneros de guerra.