MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha abogado este sábado por un fortalecimiento en las relaciones entre la Alianza Atlántica y Rusia, así como un acuerdo que resuelva de una vez por todas las tensiones con Moscú sobre el reciente despliegue de un sistema de misiles ruso cerca de la frontera con Lituania y Polonia.
"Ahora no es el momento de excusas. Debemos fijar una fecha límite razonable y resolver un acuerdo pragmático", hizo saber el secretario general durante la celebración de la Conferencia de Seguridad de Múnich, donde pidió a Rusia que abandone "el vocabulario y el comportamiento del pasado".
Rasmussen realizó estos comentarios un mes después de que Rusia anunciara la instalación del sistema 'Iskander', formado por misiles balísticos de alta movilidad con autonomía de unos 480 kilómetros, ideado en 2006. El presidente ruso, Vladimir Putin, declaró en su día que el sistema era vital para Rusia a la hora de contrarrestar el sistema de misiles europeo de la OTAN.
"Nadie quiere regresar a esa etapa de hostilidad, así que tenemos dos opciones: o la fría cooperación, o nos implicamos y avanzamos hacia una sociedad estratégica, porque, de todas las relaciones que mantiene la OTAN, ninguna ofrece un mayor potencial que la que mantiene Rusia", declaró Rasmussen.
El secretario general se agarró a la esperanza de que la cumbre de Lisboa de 2010 concluyó con el acuerdo entre ambos bloques sobre la necesidad de "crear una verdadera sociedad estratégica", aunque reconoció que, "en otros puntos clave, las posturas están muy distanciadas".
