Los rebeldes usarán si es necesario armamento pesado para tomar Bani Walid

Actualizado: miércoles, 14 septiembre 2011 19:27


AL NORTE DE BANI WALID (LIBIA), 14 Sep. (Reuters/EP) -

Un comandante de las fuerzas rebeldes libias ha advertido este miércoles de que, si es necesario, usarán armamento pesado para tomar la ciudad de Bani Walid, controlada aún por las fuerzas leales al régimen anterior, y ha instado a los civiles a huir.

El comandante Daw Saleheen, que dirige a las fuerzas regionales que luchan por el control de Bani Walid, situada a 180 kilómetros de Trípoli, ha afirmado que los combatientes leales al coronel Muamar Gadafi han colocado lanzacohetes y morteros en viviendas de civiles.

Saleheen ha añadido que sus hombres tendrán que hacer frente a unos 1.200 combatientes del bando de Gadafi, entre ellos 200 francotiradores apostados en azoteas.

"Conocemos sus posiciones. Hemos transmitido a todos los civiles el mensaje de que, si pueden, deber marcharse ya", ha declarado a un grupo de periodistas a las afueras de Bani Walid. Cientos de residentes han abandonado la ciudad en los tres últimos días porque, según dicen, los enfrentamientos callejeros y la falta de comida y combustible hacía imposible quedarse.

Bani Walid es, junto a Sirte --ciudad natal de Gadafi, situada en la costa mediterránea-- y Sabha --en el desierto del sur--, uno de los últimos grandes bastiones que le quedan al régimen anterior.

RESISTENCIA

Las fuerzas apoyadas por el Consejo Nacional de Transición, que ahora funciona como gobierno interino, han encontrado una resistencia mayor de la que esperaban en Bani Walid. En un principio pensaron que solo habría varios centenares de combatientes leales a Gadafi.

"Si utilizan armamento pesado, nosotros haremos lo mismo", ha asegurado Saleheen, que no ha querido revelar cuándo comenzarán los combates, aunque ha aclarado que los civiles dispondrán de tiempo suficiente para marcharse.

Según Saleheen, cerca de una cuarta parte de la población --que asciende a 100.000 habitantes-- se ha ido ya, pero muchos permanecen atrapados en zonas controladas por Gadafi.

El comandante ha señalado que, aunque no es una zona muy poblada, es "un terreno complicado debido a las montañas". El centro de la ciudad se encuentra a una mayor altitud, de manera que las fuerzas de Gadafi pueden apuntar a sus enemigos desde arriba.

Además, los combatientes que apoyan al régimen de Gadafi habrían cubierto con petróleo la calle que lleva al centro de Bani Walid, dificultando el avance de los rebeldes. Éstos han rodeado la ciudad y, según Saleheen, están seguros de que Saif al Islam Gadafi, hijo de Muamar Gadafi, se esconde allí junto a Musa Ibrahim, portavoz del dirigente derrocado, y a Tohami Jaled, un responsable de la seguridad interior.

"Tenemos ojos dentro de la ciudad", ha afirmado. Todavía se desconoce el paradero de Gadafi, pero su portavoz ha dicho este miércoles que continúa en Libia.

La población de Bani Walid se beneficiaba de la generosidad de Gadafi, posible gracias a los ingresos obtenidos del petróleo, y las conversaciones que han mantenido los rebeldes con los líderes de las tribus locales para llegar a una solución pacífica han fracasado.

"Algunas personas de Bani Walid están en contra de la revolución porque Gadafi les dio dinero y coches y también prestaciones sociales para los hombres jóvenes desempleados", ha detallado Saleheen. "Los líderes tribales prefieren no luchar y rendirse (...), pero algunas personas apoyaban a Gadafi, así que están resistiendo", ha agregado.